Taxistas liberaron el puente Neuquén-Cipolletti, pero protestan en la Justicia

El corte sobre el puente carretero que une Neuquén y Cipolleti, que iniciaron los taxistas neuquinos ayer por la noche tras que tres jueces dieran lugar al pedido de prisión domiciliaria de los tres imputados que atacaron al chofer Pablo Sánchez el año pasado, quedó liberado.

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Sin embargo, el hermano del taxista atacado, Rubén Sánchez, trasladó su bronca a las veredas de la Ciudad Judicial. El hombre se encadenó del tobillo a una columna de luz y amenaza con prenderse fuego: «No entiendo lo que hicieron los jueces».

Indicó que pautó una reunión con el fiscal José Gerez para las 9 de la mañana, para que les expliquen como seguirá el procedimiento. De la misma participarán también Pablo Sánchez y su madre.

«Nos van a explicar si van a tener tobillera», contó y añadió que hasta ahora lo único que saben es que la policía realizará rondas en los domicilios de los imputados tres veces al día y que Pablo tendrá custodia permanente. «Mi hermano si queda preso en su propia casa», reprochó.

Rubén Sánchez relató que el 21 de enero en una audiencia se les extendió la prisión preventiva a los imputados por tres meses más, pero que una semana después les informaron desde la Fiscalía que sólo sería por un mes. «Y después esto. Acá hay algo raro», enfatizó.

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Sostuvo que lo que intenta la defensa es llegar a un acuerdo con Pablo Sánchez, para que la pensa sea menor: «Me parece una ridiculez».

Hasta tanto se concrete la reunión, Rubén permanecerá encadenado y se espera que asistan más taxistas para darles apoyo.

Daniel Costisch, Ezequiel Roa Moreno y Axel Jara son los tres imputados que aguardarán al juicio, que será dentro de un mes, en sus casas.