Un padre admitió haber abusado de su hija y lo declararon culpable

Un sujeto reconoció haber sido el autor de los abusos en perjuicio de su hija pequeña durante una audiencia judicial que se hizo hoy martes.

El imputado admitió su responsabilidad ante el tribunal conformado por los jueces Héctor Leguizamon Pondal, Marcelo Barrutia y Bernardo Campana. El reconocimiento de su culpa era la condición indispensable para que el acuerdo parcial entre la fiscalía, el acusado y su defensor prosperara. De esta forma, el acusado no tendrá que ir a un juicio oral.

Los jueces analizaron el acuerdo presentado y lo validaron. El 22 de marzo se hará la audiencia para determinar la pena que se le impondrá a partir de las pruebas que la fiscalía y la defensa presenten.

El fiscal Martín Govetto pidió en la audiencia que se hizo este martes que se declare al imputado autor penalmente responsable del delito de abuso sexual agravado en perjuicio de su hija.

Fuentes judiciales informaron que Govetto, junto con la fiscal adjunta Mariana Lascano, expusieron las pruebas que sostienen la acusación en contra del acusado, cuya identidad se mantiene en reserva para proteger a la niña que es la víctima.

Govetto valoró el testimonio de la víctima y de su entorno familiar. También, las pericias de la médica psiquiatra forense, de la psicóloga forense, de informática forense y por la responsable del Laboratorio Regional de Genética, Silvia Vanelli Rey. “El material probatorio es contundente”, expresó el fiscal.

Al imputado, la fiscalía lo acusó de haber hecho tocamientos en perjuicio de su hija cuando tenía 5 años. El sujeto aprovechó la convivencia para cometer los abusos simples.

El fiscal advirtió que cuando la nena cumplió 10 años, el padre continuó con los abusos sexuales, con acceso carnal. De acuerdo a la imputación, el sujeto golpeó y amenazó a la nena para someterla sexualmente.

La fiscalía advirtió que mediante esta relación incestuosa, el hombre generó una situación crónica de trauma. Los dos últimos hechos ocurrieron en julio de 2018, cuando se radicó la denuncia y se le impuso prisión preventiva al acusado.

La víctima fue asistida y acompañada desde julio pasado por Andrea Mokaniuk, piscopedagoga y Ana Clara Marcellino, trabajadora social de la Oficina de Atención a la Víctima.

El defensor oficial Juan Pablo Laurence adhirió tanto a la solicitud de la fiscalía como a la calificación propuesta. Pero falta determinar la pena. El acusado estuvo de acuerdo.

Desde el Ministerio Público Fiscal indicaron que al sujeto se le atribuyeron los delitos de abuso sexual simple reiterado, doblemente agravado por convivencia con una menor y el vínculo en concurso real con el de abuso sexual reiterado calificado por haber sido cometido con acceso carnal, – al menos tres hechos en concurso real -, doblemente agravado por convivencia con un menor de edad y el vínculo, en concurso ideal con el delito de corrupción de menores por la promoción y facilitación, agravado por haber sido cometido mediante violencia, amenaza y ascendencia.