Una escuela cipoleña se queda sin anexo

CIPOLLETTI (AC).- Si para fin de mes el Consejo Provincial de Educación no renueva el contrato de la casa que alquila como anexo de la escuela de jornada completa en Cipolletti, el establecimiento se quedará sin lugar para la biblioteca, las áreas de tecnología y de expresión y el depósito para los alimentos.

Desde hace algunos años, y por falta de espacio en el edificio central, se alquila el inmueble ubicado enfrente de la escuela 50, que está en la zona de chacras. Sin embargo a principios de la semana pasada el CPE notificó al propietario de que no se le renovará el contrato.

«Nos enteramos por el dueño. A nosotros no nos llegó ninguna notificación, aunque el hombre nos mostró la carta documento y dice que es por ajuste presupuestario. No sabemos qué vamos a hacer porque en la escuela no tenemos lugar para reubicar todas las cosas», explicó preocupado un grupo de padres y docentes sobre la situación.

A fines de esta semana deberían retirar las pertenencias de la casa.

Para ellos el problema está centrado en el hecho de que «siempre quisieron transformar la jornada completa en jornada extendida».

Justificaron la apreciación en otras medidas tales como «el cierre de una sección especial de séptimo grado o el traslado de un portero sin la consiguiente cobertura del cargo».

«Desde el CPE nunca se acercaron a preguntarnos si necesitábamos algo. Siempre vinieron a deslizar la posibilidad de que nos transformemos en jornada extendida», aseguraron.

Explicaron que la diferencia de modalidad no es sólo de cantidad de horas en la que los chicos están en la escuela sino también de proyecto.

«Cumplimos 20 años de trabajo y la mayoría de nuestros alumnos siguieron el secundario y algunos ya están en la universidad», destacaron.

Autoridades ausentes

La preocupación se acentuó en los últimos días. El pasado viernes se convocó a las autoridades educativas para que dieran una respuesta a la problemática. Pero sólo estuvieron en la reunión docentes, padres y representantes de UNTER. Lo concreto es que los plazos apremian, ya está el aviso de no renovación, pero nada se sabe sobre dónde funcionarán las áreas en cuestión.