Una ola de atentados sacude a Irak

Al menos 27 personas murieron hoy, entre ellas 17 reclutas iraquíes que provenían de la provincia de Al Anbar, en nuevos ataques lanzados tras el atentado perpetrado el sábado en la localidad de Emerli, donde informes oficiales elevaron a 130 la cantidad de víctimas mortales. El ataque contra el convoy de reclutas árabes sunnitas fue perpetrado con explosivos cuando la caravana provenía de la provincia de Al Anbar, oeste del país, informó la agencia de noticias italiana ANSA. Allí murieron 17 personas y otras 20 sufrieron heridas, reportaron fuentes de las fuerzas de seguridad y el ejército. Otras seis personas murieron y siete sufrieron heridas en un atentado con coche-bomba en una calle muy concurrida del distrito chiita de Karrada, centro de Bagdad, informó la policía. En dos ataques lanzados por la mañana en Bagdad perdieron la vida dos coroneles y dos guardias, según reportes de la agencia Aswat al Irak. El primer ataque fue perpetrado cuando el coronel Abdul Karim Hamid, comandante de las Fuerzas de Protección del Ministerio de Electricidad, atravesaba el barrio Al Suleikh en automóvil junto a dos guardias. Otro coronel del ejército, Jawad Kazem al Saadi, fue muerto a tiros en la zona de Al Qahera, periferia de Bagdad. El ejército de ocupación estadounidense reportó en un comunicado que un soldado murió el sábado y cuatro sufrieron heridas, en un ataque con explosivos en la provincia de Salaheddine, norte de Irak. El embajador estadounidense en Irak, Ryan Crocker, informó en un comunicado que dos iraquíes empleados de la sede diplomática, quienes permanecían desaparecidos desde mayo, fueron hallados sin vida e identificados por reconocimiento de huellas dactilares. Los empleados, Hazim Hanna y su esposa Enel Meskoni, fueron secuestrados en mayo y su muerte reivindicada el 31 de ese mes por el Estado Islámico en Irak, alianza de grupos armados sunnitas vinculados a la red Al Qaeda.