Vega terminó su aventura

El reginense pasó la noche en las dunas, cerca del vivac.

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“Pata” se pegó duro y tuvo que abandonar cuando le faltaba poco para terminar la etapa.

La aventura Dakar pasó a ser historia para el debutante reginense Edgardo Vega. Ayer a las 1.40, cuando trataba de completar la quinta etapa, se pegó duro contra una pared de arena. Unas cuantas horas después, repuesto del tremendo golpe, aseguró que “esta prueba es más dura de lo que me imaginaba”.

El reginense, con una Honda 450 cc. asistida por el equipo francés Mecasystem, era uno de los cuarenta participantes que estaba cerrando una etapa entre Calama e Iquique que resultó tremenda, en la que varios pasaron la noche en las dunas, como le pasó a Juan M. Silva.

Paró en varias oportunidades a auxiliar a accidentados y lo sorprendió la noche en medio de las dunas. Cuando la cobertura on line de la organización cerró su actividad, el reginense había superado el control de paso 11. Estaba a unos 30 kilómetros de la llegada.

Entre el wayn-point 12 y 13 se produjo el accidente de Vega, en medio de la noche y el frío. Por suerte, más atrás venía demorada una camioneta que paró a auxiliarle, dando la señal de alarma.

Lo que cuenta Vega, a través del celular no deja de estremecer, por las condiciones en que encaran la aventura los participantes, casi con el mismo riesgo para los profesionales como aficionados.

“Venía tranquilo, porque sabía que navegando bien iba a ganar unos diez lugares por etapa. Varios perdimos tiempo para ayudar a otros participantes. Al último lo ayudamos a sacar la moto de un pozo como de 100 metros. Eran más de la 1.30 de la mañana, por eso empecé a acelerar, sabía que el final estaba cerca y que en pocas horas tenía que encarar una nueva etapa”, recuerda Vega, dede el vivac de Iquique.

Enseguida, destaca que “estaba en medio de la nada cuando me estrellé con una pared de arena. Le pegué a más de 90 kilómetros por hora. Quedé inconsciente y con un traumatismo abdominal.

“Atrás venía una camioneta, paró a auxiliar y mandó la señal de aviso con el iritrak. En pocos minutos estaba rodeado de integrantes de sanidad de la prueba. Pero, tuve que pasar la noche en las dunas, porque si bien estaba a 30 kilómetros de la llegada, está prohibido que vuelen los helicopteros”, cuenta el “Pata”.

También asegura que “me revisaron todo, porque yo tenía miedo de tener problemas con el vaso. Pero, no. Me taparon con unas mantas y se quedaron conmigo hasta que a las 7, cuando llegó uno de los helicopteros a rescatarme y llevarme al vivac de Iquique. La moto quedó muy rota, la cargaron en el camión barredora de la organización”.

Después de ser revisado en el hospital de Iquique, el reginense recibió el alta médica y se reunió tanto con sus familiares como el equipo en el vivac de Iquique, con numerosos dolores en el cuerpo y varios machucones.

La aventura Dakar era parte de la historia. “Dura la prueba, media cruda en esta clase de caminos, eran muchos los que veníamos rezagados”, cuenta Vega. No habló de revancha, pero seguro que se alistará para un nuevo intento.


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