En una toma piden el cableado para tener energía

Vecinos de la toma 29 de Septiembre piden al municipio las bobinas comprometidas para regularizar las conexiones eléctricas.

En una toma piden el cableado para tener energía

Las familias del asentamiento 29 de Septiembre esperan que la municipalidad entregue los materiales para hacer el cableado antes del invierno. Hoy los tableros eléctricos comunitarios, situados en la Ruta Nacional 40 Sur, están saturados porque abastecen a más de 200 casas.

A medida que se acerca el invierno, en la toma 29 de Septiembre aumenta la preocupación. Vendrán las lluvias, las nevadas y el frío que castiga con dureza. Y las más de 200 familias que viven en ese lugar aún esperan que el gobierno del intendente Gustavo Gennuso cumpla con la entrega de las bobinas que comprometió para tratar de regularizar las conexiones eléctricas.

Desde los nueve tableros que la CEB instaló tiempo atrás al costado de la Ruta Nacional 40 Sur salen decenas de cables, que después se multiplican de manera improvisada por numerosos lotes, para que cientos de casas puedan tener electricidad.

Son cables que están sobre la tierra y que forman parte del paisaje con el que conviven cientos de niños que recorren el lugar. El peligro está latente a cada paso.

Patricia Millalonco se instaló en el lugar a finales de septiembre del 2011, junto con otras once familias. La toma creció sin pausa y no se detiene. Hasta octubre pasado eran 226 familias en el sector, ubicado en inmediaciones del barrio 645 Viviendas y 2 de Abril.

Millalonco se transformó en una referente del barrio y señaló a “DeBariloche” que resolver el problema de la luz es una de las principales preocupaciones, junto con la puja judicial que mantienen con la persona que asegura ser dueño de una de las parcelas y que reclama su restitución.

Advirtió que los tableros situados en proximidades de la ruta “están saturadísimos”.

Comentó que el municipio se había comprometido a entregar a partir de enero pasado 23 bobinas de cable, que son claves para que se puedan habilitar los tableros que la CEB instaló sobre la calle Cacique Prafil. Pero sólo recibieron dos hasta el momento.

Dijo que el pedido se redujo a 16 bobinas para que no se le haga tan costoso al municipio, pero aún no hay novedades. “Estamos rogando que las bobinas estén antes del invierno”, sostuvo.

Explicó que entre los vecinos se juntó plata para comprar los bornes para las conexiones hacia las viviendas y se hicieron las cajas que están emplazadas en sitios puntuales. Comentó que están haciendo las zanjas para poner el cableado subterráneo, pero sin los cables no pueden avanzar.

Organizar las conexiones eléctricas es una urgencia para garantizar la seguridad de las familias que viven en ese lugar.

Recordó que hubo dos vecinos que murieron porque se les incendiaron sus precarias casillas. El año pasado fue Hugo Morales y el viernes último Mario Huallpa.

“No hay luminarias y de noche es una boca de lobo. Empezamos siendo 12 familias y a octubre éramos 226, pero cada semana viene una más a instalarse”.

Patricia Millalonco es referente del asentamiento donde vive desde el 2011.

Datos

“No hay luminarias y de noche es una boca de lobo. Empezamos siendo 12 familias y a octubre éramos 226, pero cada semana viene una más a instalarse”.

Formá parte de nuestra comunidad de lectores

Más de un siglo comprometidos con nuestra comunidad. Elegí la mejor información, análisis y entretenimiento, desde la Patagonia para todo el país.

Quiero mi suscripción

Comentarios