El nuevo fenómeno foodie: los bares de cereales
¿Moda pasajera o tendencia para rato? Más de 175 variedades de cereales y 25 tipos de leche. Estética vintage a full.
El nuevo fenómeno foodie: los bares de cereales
¿Moda pasajera o tendencia para rato? Más de 175 variedades de cereales y 25 tipos de leche. Estética vintage a full.
El nuevo fenómeno foodie: los bares de cereales
¿Moda pasajera o tendencia para rato? Más de 175 variedades de cereales y 25 tipos de leche. Estética vintage a full.
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Los cereales son las estrellas del momento en la industria de la alimentación global.
Los foodies y lo hipsters, con ese mix de nostalgia y modernidad, supieron instalar en el mercado los cupcakes, primero; el yogurt después.. más la quinoa y la comida asiática. Ahora, lo que queda de ellos más las nuevas tribus millennials que han surgido le están dando a los cereales un papel protagónico.
“Hay que ser idiota para elegir un desayuno por el color y no por el sabor”, opina el escritor estadounidense John Green (Bajo la misma estrella). Aunque suene idiota, estimado Green, la gente está en otra y no le importa ser superficial o frívola por momentos. Muchos menos si sos teen.
Tanto es así que se fortalecen como tendencia los bares de cereales, que suenan a muy vintage. Tienen mucho sabor a los años ´80 y 90 y a los desayunos americanos. Esta moda no se enmarca en la onda saludable porque las cantidades industriales de azúcar que tienen la mayoría de estos productos asusta.
La movida empezó fuerte en Londres y este año se ha fortalecido en Europa y muchas ciudades importantes de Latinoamérica. Estos bares ofrecen también leche entre más de 20 variedades, cereales de todo tipo para ser remojados y galletitas exclusivas de cualquier parte del mundo. Jóvenes y adolescentes mueren por esta propuesta que vale tanto para el desayuno, como para el almuerzo o la merienda. A la noche se viene el “brinner”, mezcla de breakfast for dinner: tomar leche con cereales por la noche es moda.
Si se historia un poco esta tendencia se registra que los hermanos Gary y Alan Keery en diciembre de 2014 al inaugurar Cereal Killer Cafe dieron el pie inicial a esta moda. Ellos abrieron un bar de cereales situado en uno de los barrios más hipsters de Londres, Brick Lane. Tiempo después sufrieron un ataque del grupo anarquista Class War por considerar que la apertura del negocio contribuía al proceso de gentrificación en el que está sumido el barrio desde hace años.
Esto no asustó a otros emprendedores de Manchester que abrieron Black Milk Cereal Dive, que ofrece batidos de chocolates con crema, galletitas Oreo (que son los más para cualquier adolescente del mundo), Kit Kat y trozos de tortas y bizcochos.
Después vino Cereal Hunter y Cereal Lovers Bar, en Madrid. “Queremos ser un lugar para la familia”, afirman desde ambas firmas. Italia y Alemania no se quedan atrás.
Estos lugares tienen una estética muy de la seria norteamericana “Friends”. Suelen vender hasta 175 variedades de cereales y 25 tipos de leche. Todo se sirven en inmensos tazones. Las leches tienen procedencia vegetal o animal (oveja, vaca, soja, avena, coco, avena, almendras, arroz, entre otras).
Sería bueno que a esta oferta le compitiera otra que sea saludable, con semillas incluídas.
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