4×4 urbanos y eléctricos, las estrellas en Shanghai

Todos quieren estar en una de las vidrieras (la otra es Pekín) del mayor mercado de ventas de autos a nivel mundial. Hay preocupación por el freno económico del país asiático en 2018.

El Nissan Sylphy fue presentado en sociedad en la apertura del Salón de Shanghai 2019.

El salón del automóvil de Shanghai que finaliza mañana transcurre en un marco de preocupación por la caída de ventas en China, el primer mercado mundial, y en pleno auge de las marcas locales y de los vehículos eléctricos.
Organizado cada año alternativamente con Pekín, este salón sigue siendo una cita obligada para los fabricantes de todo el mundo, a pesar de que esta vez el entorno es menos optimista.

Todas las marcas, deseosas de mejorar su oferta en el complejo mercado chino, presentan novedades, principalmente vehículos 4×4 urbanos, coches eléctricos y de conducción autónoma.

Por primera vez en casi tres décadas, las ventas de automóviles cayeron en China el año pasado (-2,8%) hasta 28,08 millones de vehículos, una cifra que no obstante es la envidia de cualquier mercado. En Argentina, por ejemplo, el año pasado las ventas llegaron a 800.000 unidades.

Ford se hizo presente con el modelo Escape.

Las ventas de coches particulares en China retrocedieron un 4,1%, hasta 23,7 millones de unidades y siguen cayendo.

Estas cifras se explican por el freno económico, la reducción de las ventajas fiscales y el conflicto comercial entre China y Estados Unidos que provoca “las dudas de los consumidores, que llevan a algunos a aplazar sus compras”, apuntó Stephan Wöllenstein, director general de Volkswagen en China.

Da igual si el mercado chino en su conjunto avanza o retrocede, porque el sector que nos interesa es el eléctrico (…), donde queremos rivalizar con los actores locales”.

Thierry Bolloré, director general de Renault.

El gigante alemán mantuvo sus ventas casi estables en 2018 gracias a sus marcas premium Audi y Porsche. Su gran rival General Motors redujo también sus ventas en cerca de un 10%.

Bajo la presión de marcas chinas, Ford o PSA (Peugeot Citroën) vieron caer sus ventas en la región.

La única excepción son los coches premium “que resistieron muy bien”, asegura Nicolas Peter, administrador de BMW. El constructor alemán aumentó sus ventas (+7,7% en 2018) pero tuvo que pagar los aranceles de Pekín a los coches importados.

“Podemos esperar medidas (de estímulo) del gobierno (chino). Soy optimista con prudencia”, reveló Hubertus Troska, el director de Daimler China, que cree que una reducción del IVA sería favorable al consumo.
En este contexto, los constructores invierten en 4×4 urbanos y en vehículos eléctricos, estrellas del salón de Shangai. Ambos sectores dominados por las marcas chinas, que copan el 42% del total del mercado.

Por ello los constructores extranjeros en China se están reforzando. Ford prevé 30 nuevos modelos en China en los próximos tres años (una decena de ellos eléctricos ) y GM otros 20.

Ford se hizo presente con el modelo Escape.

En el salón los vehículos eléctricos están en todos partes. Gracias a las subvenciones, las ventas de eléctricos e híbridos aumentaron un 62% el año pasado, aunque sólo representan el 4% del mercado.

Las marcas chinas -lideradas por gigantes como SAIC, BAIC o BYD- acaparan el 90% del sector eléctrico.

“Da igual si el mercado chino en su conjunto avanza o retrocede, porque el sector que nos interesa es el eléctrico (…), donde queremos rivalizar con los actores locales”, afirma Thierry Bolloré, el director general de Renault.

Renault, que desembarca en China, presentó en el salón su nuevo vehículo eléctrico City K-ZE.

Varias compañías chinas, como NIO, Lynk&Co y Gyon, presentaron también sus modelos futuristas de gama alta y ultra-conectados.

En 2022 China levantará las restricciones a los fabricantes extranjeros, que podrán ser mayoritarias en las coempresas con compañías chinas, pero no todo el mundo cree que vayan a cambiar las cosas.

“Sólo es un marco legal, hay que ver si es útil económicamente”, apunta Stephan Wöllenstein, y asegura que Volkswagen está llevando a cabo “discusiones para ampliar y profundizar las alianzas con los gigantes públicos FAW y SAIC”.

Estos acuerdos, que facilitan la implantación y las relaciones con los proveedores y las autoridades locales, podrían favorecer que China sea crucial para el sector mundial del automóvil.


Formá parte de nuestra comunidad de lectores

Más de un siglo comprometidos con nuestra comunidad. Elegí la mejor información, análisis y entretenimiento, desde la Patagonia para todo el país.

Quiero mi suscripción

Comentarios