La oferta oficial es por 5 millones al año

NEUQUEN (AN).- El aumento salarial que el gobierno provincial ofreció a los docentes a principios de semana, tendría un impacto de 5 millones de pesos anuales en las arcas estatales y se sumaría a los 38 millones de pesos correspondientes al incremento otorgado por decreto a principios de mes.

Así lo afirmaron ayer asesores del ministerio de Hacienda en declaraciones a «Río Negro».

Los 5 millones de pesos comprenden la incorporación de sumas al básicos, el incremento de pagos por los ítems de antigüedad y zona y los desembolsos por aguinaldos en esos conceptos.

«Entre el aumento de principios de mes -38 millones- y el ofrecido ahora -5 millones- la suma total llega a 45 millones de pesos anuales más en salarios», señalaron. Aunque del total, 19 millones aportó el gobierno nacional con la primera suba.

Ambas propuestas fueran rechazadas por el gremio docente por considerarlas insuficientes.

El primero de los incrementos que entró en vigencia este mes, impactó en mayor medida en los bolsillos de los directores de las escuelas de los distintos niveles que en algunos casos percibieron hasta 600 pesos.

Para los cargos docentes el monto fue muy inferior.

El restante, difundido por el ministro de Educación Mario Ever Morán a principios de semana para tratar de descomprimir el conflicto, contempla una suba de 30% del básico mediante el traspaso de sumas remunerativas y no bonificables; una suba en los ítems de antigüedad y zona como consecuencia de un básico mayor.

Los técnicos de Hacienda no especificaron si el monto incluye el pago de los 110 pesos de incentivo docente. Este último concepto es abonado por el gobierno nacional, pero la provincia prometió cancelarlo con fondos propios ante los retrasos registrados en los giros.

La última oferta incluyó trasladar 38 pesos que en la actualidad están atados al presentismo como remunerativos y no bonificables, a los que sumarían además los 50 pesos otorgados con esta última modalidad meses atrás.

La contrapropuesta hecha por el gremio, consistió en cinco ejes: pasar todo el presentismo al básico; incluir en los aumentos a los auxiliares de servicio; que no se apliquen descuentos por los días de paro; la conformación de una mesa para discutir las falencias en materia de infraestructura existentes; y la restitución de la zona como se pagaba hasta el año 1995.

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