Sebastián Hernández: “El productor sigue apostando a la fruticultura”

El titular de la Federación de Productores de Fruta de Río Negro y Neuquén destacó el esfuerzo del sector por ser competitivo y mantener chacras con frutas de calidad.

Revalorizar el sector productivo frutícola regional es una materia pendiente para los actores de la economía y la política provincial y nacional.

A pesar de los vaivenes que sufre el sector, su aporte al movimiento económico continúa siendo importante en todos los sentidos. La fruticultura de Allen es un ejemplo en la materia.

En este nuevo aniversario de la ciudad, Diario Río Negro conversó con Sebastián Hernández, titular de la Federación de Productores de Fruta de Río Negro y Neuquén.

Sebastián Hernández, titular de la Federación de Productores de Río Negro y Neuquén. (Foto: Juan Thomes)


Para este productor allense, que representa la cuarta generación familiar dedicada a la fruticultura en Allen, hay un recambio generacional, un posicionamiento de productores que son descendientes y que han hecho un esfuerzo en estos últimos años dando continuidad a lo que ya venían haciendo sus abuelos o los padres.

“Se siguen haciendo trabajos en las chacras, a pesar de lo complejo que está a nivel económico hay productores que están apostando a la fruticultura y continúan reconvirtiendo. Entienden que si mejora la situación y se acomoda van a estar con variedades de punta para afrontar los requerimientos del mercado”, expresó el directivo frutícola.

La fruticultura sigue siendo una actividad importante en el andamiaje económico regional.


Hernández fue enfático en su idea: “Quiero que quede claro que la producción no está bien, más allá de que el productor está reconvirtiendo lo hace a partir de un esfuerzo enorme y por el solo hecho de no quedarse atrás”.

Pese a que la pera que se produce en Argentina es del agrado del consumidor mundial, hay detalles que impiden que sea un cultivo rentable. Dijo Hernández: “En realidad hace varios años que la pera no cubre el costo productivo. Al ser nosotros tan caros para producir nos cuesta competir a nivel mundial y la pera el 70 / 80% se tiene que exportar. En estos últimos años la manzana vino subsidiando el costo de la pera.

“Quiero que quede claro que la producción no está bien, más allá de que el productor está reconvirtiendo lo hace a partir de un esfuerzo enorme y por el solo hecho de no quedarse atrás”.

Sebastián Hernández, titular de la Federación de Productores de Fruta de Río Negro y Neuquén.

Entonces, ¿por qué se sigue invirtiendo en las chacras? Para el directivo “el mismo sistema lleva al productor a funcionar de esa manera. La disyuntiva es fácil: trabajás o no trabajás la chacra. Si decidís trabajarla lo tenés que hacer bien, porque si no la calidad se cae y te saca del sistema. No es que vos podés decir ‘este año no hago nada, dejo todo así y veo si el año que viene está bueno y sigo’… no es así”.

Malla antigranizo, los productores aspiran a cubrir cada vez más superficie cultivada con este producto.


Hernández alertó que “falta mucho por hacer en fruticultura. Uno de los reclamos que tenemos como actividad es el financiamiento para reconversión y tecnificación, entre ellos malla antigranizo y riego por aspersión. Esto tiene que ver con que no podés hacer un esfuerzo enorme durante todo un año y que se vaya en un rato por una helada o un granizo. Otro punto tiene que ver con bajar la presión impositiva”.

Centro de gestión productivo para asesorar al productor



El dirigente frutícola confirmó que la Federación de Productores firmó un comodato por 30 años con la provincia de Río Negro por lo que era el ex edificio del predio de Fruticultura en Allen. Allí se conformará un Centro de Gestión Productivo para toda la región que les de a los productores la posibilidad de tener capacitación laboral, legal y contable.

“Ahora estamos trabajando en una identificación de cada productor mediante un código QR, donde va a salir su foto, su historia, para que cuando el productor le venda a alguna empresa o a un comercializador, a través de ese código el consumidor pueda saber a quién le está comprando esa producción, como para valorizar el trabajo de cada uno de los productores”, comentó Hernández.

Aclaró que “también buscamos certezas sobre el consumo de exportación y de mercado interno para saber cuál es el requerimiento comercial de cada variedad y de esta manera generar un equilibrio dentro de las producciones y la reconversión de la actividad”, finalizó.