«15 años sin José y sin justicia», Rodrigo Buteler recordó al trabajador municipal que murió en el atentado de Cipolletti
El hecho ocurrió la madrugada del 13 de julio en Cipolletti. La causa fue archivada y no hay culpables. El intendente de Cipolletti hizo un contundente posteo para exigir justicia.
El 13 de julio de 2010 fue uno de los días más trágicos para Cipolletti. José Maciel, un trabajador municipal de 60 años, fue víctima del peor de los atentados mientras cumplía su labor como barrendero, al tomar una bolsa que en su interior tenía una bomba casera. A 15 años del hecho, el intendente Rodrigo Buteler publicó un posteo para recordarlo y exigir justicia de un crimen que quedó «impune».
«15 años sin José y sin justicia», escribió Rodrigo Buteler en su cuenta de la red social X y tras esto, agregó: «Hoy se cumplen 15 años del asesinato de José Maciel, trabajador municipal de nuestra ciudad, víctima de un crimen que aún permanece impune».
En este sentido contó que José era parte del equipo de servicios públicos y lamentablemente, «fue asesinado mientras cumplía con su labor». «Su pérdida dejó una marca profunda en sus compañeros, su familia y toda la comunidad cipoleña», expresó.
Luego de esto renovó el pedido de justicia y aseguró: «Su memoria sigue presente entre quienes compartieron trabajo, esfuerzo y compromiso con él».
15 AÑOS SIN JOSÉ Y SIN JUSTICIA.
— Rodrigo Buteler (@RodrigoButeler) July 13, 2025
Hoy se recuerda 15 años del asesinato de José Maciel, trabajador municipal de nuestra ciudad, víctima de un crimen que aún permanece impune.
José era parte de nuestro equipo de servicios públicos y fue asesinado mientras cumplía con su labor. Su… pic.twitter.com/rTAMxfyKZD
15 años de la muerte de José Maciel, el trabajador municipal víctima de un atentado en Cipolletti: el hecho y lo que pasó con la investigación
Maciel tenía 60 años, estaba casado y era padre de 5 hijos. La madrugada del 13 de julio a las 3.10 un explosivo acabó con su vida.
El hecho ocurrió en la calle Fernández Oro, frente a la Escuela de Suboficiales y Agentes de la Policía de Río Negro. En ese lugar la víctima manipuló una bolsa y activó una bomba que estaba en el interior.
Horas más tarde un grupo especializado pudo desactivar otra que se habían colocado en la ventana de la empresa Telefónica, a pocos metros de la comisaría cuarta, en el centro de Cipolletti.
Muchas fueron las líneas de investigación que tuvo la causa, pero ninguna dio resultados positivos. Según los investigadores, el artefacto explosivo fue armado con una garrafa de gas de tres kilos, cargada con pólvora y conectada a un detonante que se activó al abrirse la bolsa.
La justicia provincial estuvo investigando la causa los primeros meses y luego los expedientes se enviaron al Juzgado Federal de Roca. Allí se indagó sobre llamados, realizaron escuchas y analizaron las imágenes de una cámara de seguridad pero ninguna de las medidas permitió grandes avances. El fuero federal terminó archivando la causa.
Cuando se cumplieron dos años del hecho el gobernador, Alberto Weretilneck, insistió con que al atentando estaba dirigido a la Policía. Dijo que fue una respuesta a la lucha contra el narcotráfico o que tuvo relación con los asesinatos de Sergio Cárdenas y Nicolás Carrasco, ocurridos en 2010 en Bariloche.
Comentarios