Carrió desata una tempestad en Cambiemos

Difundió una carta a Macri. Insistió en que pedirá el juicio del ministro de Justicia. Y advirtió que no negociará “impunidad”.

Una tempestad. Cuando la tormenta cambiaria parece ceder, tronó la diputada Elisa Carrió, líder de la Coalición Cívica, fundadora y sostén de Cambiemos. Carrió difundió ayer una carta pública al presidente Mauricio Macri en la que ratificó que pedirá el juicio político contra el ministro de Justicia Germán Garavano, a quien acusa de amparar la impunidad en causas contra los expresidentes Cristina Kirchner y Carlos Menem.

Fue un virtual emplazamiento al presidente: “La República está sumamente herida por un sector del gobierno que por conveniencia no desea verdad, justicia y condena. Esto no es negociable. Ni la República. Ni la impunidad”, dice el texto subido a Facebook .

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Más tarde, Carrió rechazó la absolución del ex presidente Menem en la causa por la venta de armas y dijo que “demuestra la visceral impunidad que hiere gravemente la República”. Además, advirtió que avanzará judicialmente contra los jueces. “Esto involucra a Menem y a los jueces que lo salvaron en el delito de infames traidores a la patria. Ahora entiendo mi proscripción en la comisión bicameral de seguimiento del Ministerio Público y los dichos de Garavano”, dijo en un comunicado.

Carrió había anticipado el miércoles que iría por el juicio contra Garavano, quien había cuestionado el dictado de prisiones preventivas en la justicia contra Cristina Kirchner (ver “Las declaraciones…”)

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Garavano fue centro ayer de la reunión de Gabinete en la Casa Rosada. Trascendió que el presidente evaluó que el ministro cometió un error y debía aclarar sus dichos. Pero lo respaldó.

“No hablo sobre casos concretos. Hablo en abstracto y sobre consideraciones genéricas y era una referencia institucional que marcaba que a los países les hace muy mal” que se detenga preventivamente a un expresidente , dijo Garavano a la salida de la reunión de Gabinete. Buscó enfriar la polémica y agregó que no tiene “ningún reproche o entredicho” con la diputada Carrió.

Aunque las diferencias de Carrió con Garavano no son nuevas, sorprendió el estallido de la interna en un momento difícil del gobierno en el frente económico. Un daño autoinfligido.

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Las declaraciones que dispararon el conflicto

El ministro de Justicia Germán Garavano dio una entrevista el miércoles a una radio alineada con el kirchnerismo –El Destape Radio– en la que cuestionó los pedidos de prisión preventiva del juez Claudio Bonadio contra la expresidenta Cristina Kirchner en las causas de los “cuadernos de las coimas” y el pacto con Irán por la AMIA.

“Nunca es bueno que se pida la detención o se detenga preventivamente a un expresidente”, dijo Garavano, quien evaluó que “no hay elementos para pensar que (CFK) pueda fugarse o entorpecer” las investigaciones.

Las declaraciones de Garavano coincidieron con la elevación a juicio oral de una cuarta causa contra Cristina Kirchner y las versiones –confirmadas ayer– sobre la absolución del presidente Menem en la causa por contrabando de armas.

Carrió está desquiciada. No le presto ninguna atención certera. Que le pida el juicio político [a un ministro], que después se lo saque… no me parece”.

Agustín Rossi, jefe del bloque de Diputados del FpV


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