Canopy, el deporte que hace furor en Chapelco

Unos 15.000 turistas disfrutaron de las propuestas del verano en el cerro, donde la adrenalina no faltó a la hora de buscar aventura en este bello sitio de San Martín de los Andes.

SAN MARTIN DE LOS ANDES (ASM).- La cantidad de turistas que a diario visitan el cerro Chapelco para disfrutar de su variada propuesta de verano, superó las expectativas de la empresa, desde donde se esperaba, al iniciar las actividades, la visita diaria de 250 personas y lograron duplicar este objetivo. Federico Soto, prensa de Chapelco, informó que «ya rondamos los 15.000 visitantes en lo que va de la temporada y estamos analizando extender la temporada el próximo verano, iniciando las actividades el 15 de diciembre».

Y entre las experiencias más divertidas y atractivas que propone Chapelco Verano, sin duda el canopy es la que más adeptos tiene. Con los cupos llenos en todos los horarios de la jornada es la actividad más elegida por la mayoría de los 15.000 turistas que visitaron el cerro hasta hoy.

No se trata tan sólo de descender desde la cota 1700 amarrado de un arnés por un cable de acero. Es una increíble sensación de velocidad y vértigo deslizándose suspendido a varios metros del suelo por los 1300 metros. de recorrido que ofrece el circuito entre los tupidos bosques de lengas, emergiendo, de cuando en cuando, desde las copas de los árboles a los claros, los mallines y sobre los arroyos que bajan desde las altas cumbres.

Antes de llegar al punto de partida, el grupo de guías enseñan el mecanismo de poleas y las técnicas para ubicar el cuerpo en un pequeño tramo de cable instalado especialmente a 1 metro de altura, en la base de la silla del Graeff. Allí le dan a los visitantes el equipo necesario y casco explicando detenidamente las recomendaciones básicas de seguridad. La clave es saber frenar, del resto se encarga la gravedad. Una vez en el punto de partida, amarrados al cable de seguridad todos esperan la indicación del guía que los acompaña para despegar los pies de la plataforma y entregarse a esa sensación única.

Un sonido agudo acompaña el recorrido por cada tramo. Cuanto más agudo, más veloz es el recorrido. En los primeros tres tramos el cuerpo se acostumbra a la posición y la mano hábil a frenar en el momento en que el guía lo indica.

En el quinto, el más largo de todos, en el que se sobrevuela un arroyito a más de 40 metros de altura, solo se puede disfrutar y pedir que al menos extiendan el cable hasta las calles del pueblo.

Los tramos restantes son pura diversión y entretenimiento. Mientras el grupo camina hasta el punto de encuentro solo se escuchan comentarios de la indescriptible sensación y de las ganas de volverlo a hacer. Para eso hay Canopy hasta el 2 de marzo, día en que Chapelco Verano cierra las puertas luego de este festejado regreso.

Este turismo aventura -se recordó desde los organizadores- es exclusivamente ambientalista y de esparcimiento y recreación, ya que el turista que lo practica se inserta, en el mismo corazón de nuestro bosque nativo, y se impregna del naturalismo típico de nuestra zona y de su biodiversidad, conociendo y vivenciando los distintos tipos de ejemplares arbóreos nativos, paseando sobre el dosel del bosque, pudiendo observar absolutamente todo el sotobosque, desde el nivel más alto.


Formá parte de nuestra comunidad de lectores

Más de un siglo comprometidos con nuestra comunidad. Elegí la mejor información, análisis y entretenimiento, desde la Patagonia para todo el país.

Quiero mi suscripción

Comentarios