River metió un triunfo clave en la Libertadores: 1-0 ante Universitario, en Lima
Paulo Díaz, a los 17 minutos, anotó el único gol del partido.
Debutar a pie firme es clave. Y si se suma de visitante, mucho mejor. Todo eso hizo River en la primera función de la Copa Libertadores. Logró un justo triunfo sobre Universitario de Perú, ganó 1-0 y picó en punta en la fase de grupos de la máxima competencia continental. El equipo argentino no descolló, pero fue superior y casi nunca sufrió ante un rival limitado que se la jugó en el cierre, pero falló en los últimos metros.
El Millonario, que salió al campo de juego con un retoque por línea, tuvo un primer tiempo muy positivo. Arrancó mejor, sacó provecho de la pelota parada y, por momentos, encontró esa triangulación siempre necesaria para marcar diferencias.
Paulo Díaz volvió a la titularidad y los 17 rompió el cero, Kevin Castaño fue titular por primera vez y mostró quite, pero también calidad y la dupla Seba Driussi-Facundo Colidio exigió siempre. Así, sin brillar, pero con un andar sólido, River, se fue al vestuario tranquilo con el 1-0. Sólo dos momentos pusieron alguna duda en ese arranque: la tempranera amonestación a Enzo Pérez y un descuido en el final, que terminó en un disparo de Andy Polo.
El local emparejó, pero no lastimó
La historia fue diferente en el complemento. Universitario fue por el empate y mejoró su imagen. Sin embargo, le costó generar fútbol en los últimos metros y en cada respuesta de River, quedaba la sensación de que podía llegar el segundo, especialmente cuando la pelota pasó por Franco Mastantuono.
Sin embargo, el Millonario perdió la batalla del medio en ese lapso del partido, el Muñeco se dio cuenta y equilibró con el ingreso de Santiago Simón. También entró Miguel Borja, porque el objetivo central siempre fue liquidar la historia. A los 25, Maxi Meza pudo liquidar la historia, con un remate que dio en el palo, aunque esa sensación de superioridad ya no fue igual a la del arranque.
Con poco, el dueño de casa lo complicó (Franco Armani, fiel a su estilo, apareció con un par de atajadas claves)y Gallardo, desde el costado, buscó cerrar el partido con un triple cambio. No tiró el equipo para atrás, pero claramente, sintió que el dueño de casa se le venía.
Los minutos pasaron y el Millonario lo controló el cierre sin problemas. Llegó el pitazo final y ahí, los tres puntos se metieron en el bolso. Debutar con una victoria era clave para River, lo cumplió y ahora se vendrá la primera cita como local, ante Barcelona de Ecuador. La mala: será sin público por una sanción de la Conmebol, pero está claro que el equipo irá por otro éxito que le permita dar otro paso firme en la Copa.
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