Detectan venta de tierras en los asentamientos
El municipio estableció que unos 60 lotes fiscales otorgados a precio de fomento habían sido comercializados de manera irregular por los beneficiarios. Son operaciones individuales.
NEUQUEN (AN).- Parece que algunos pobres hacen negocio con la pobreza. La municipalidad de Neuquén detectó 60 operaciones de venta irregular de terrenos fiscales y armó la primera serie de lo que seguro será en el futuro una extensa lista negra de personas que no podrán recibir más un espacio de tierra a precio promocional.
El problema se plantea en asentamientos y barrios periféricos de la capital. Los negocios lo hacen personas de escasos recursos que terminan perjudicando a vecinos de igual condición, dijeron ayer voceros de la comuna.
Las autoridades municipales dijeron que no existe una mafia organizada dedicada a este tipo de operaciones, sino que se trata de una práctica que se ha popularizado sin conexiones aparentes entre sí.
Los lotes municipales no son gratis, se pagan hasta en 48 cuotas y se pueden vender a los cinco años de cancelada la deuda.
Los funcionarios ahora descubrieron que muchos vecinos que ocupan tierras consiguen una tenencia precaria y luego las venden por encima del valor que fija la municipalidad.
Se han detectado operaciones de 3.000 a 4.000 pesos cuando el Estado cobra actualmente, por terrenos similares, precios que no superan los 2.000 pesos.
En la subsecretaría de Gestión Urbana de la municipalidad comenzaron a armar una listado de personas que vendieron en forma irregular tierras y construcciones.
Es una suerte de lista negra que ayer fue enviada al Concejo Deliberante, porque los que figuran como vendedores no podrán acceder más a uno de estos lotes que se ofrecen a precio promocional.
Alto Godoy encabeza el ránking de este tipo de operaciones con 17 casos y le siguen Villa Ceferino con 12, La Estrella con 9 y Cordón Colón con 5. También se detectaron ventas en Islas Malvinas, Valentina Sur, La Unión de Mayo, San Lorenzo, Don Bosco, Provincias Unidas y Progreso.
Las irregularidades se conocieron luego de ponerse en marcha un programa de regularización de dominio de las tierras, dispuesto por una ordenanza aprobada este año por el Concejo Deliberante.
La municipalidad vende terrenos ubicados en zonas alejadas del centro y próximos a la meseta a precios que varían entre los 1.500 y 2.000 pesos.
Para acceder a un terreno, la gente se anota en un registro y bajo determinadas condiciones -se tiene en cuenta la antigüedad, la situación social y otros parámetros- el vecino puede llegar a la firma del boleto de compra y venta. El otro camino es la ocupación, la reubicación -si el terreno es privado- y finalmente la regularización.
La municipalidad concede una tenencia precaria hasta tanto se cancele la deuda y el dominio pleno del inmueble para transferirlo comercialmente se obtiene después de los cinco años, explicó ayer a este diario Carlos Di Camilo, subsecretario de Gestión Urbana, el área de la municipalidad donde se lleva adelante la investigación de la venta de tierras fiscales.
La persona que compró un terreno en condiciones irregulares, aun actuando de buena fe, no tiene derecho a ningún tipo de reclamo en la municipalidad. Lo único que puede lograr es evitar integrar la lista negra, Pero para tener el terreno debe anotarse en el registro y volver a pagar como cualquier vecino. El dinero por la compra anterior lo pierde, excepto que el vendedor se lo devuelva.
Di Camilo calcula que son muchas las operaciones de este tipo. Dice que que no se equivoca si cuando finalice el plan superan el millar.
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