Una petrolera extranjera invertirá US$ 450 millones en Argentina

Wintershall DEA elevó en 100 millones de dólares su plan de trabajo de 4 años. Advierten que, sin cepo cambiario, las inversiones podrían haber sido mayores.

La petrolera independiente más grande de Europa, Wintershall DEA anunció que invertirá 100 millones de dólares más en Argentina en los próximos años sobre el nivel que había revelado el año pasado para llegar a un total de 450 millones de dólares en un plazo de 4 años. Sin embargo, desde la firma se advirtió que “si no hubiera un control de capitales habría un incentivo para que hubiese más inversiones”.

La frase corresponde al miembro del director de la firma y responsable para América Latina, Thilo Wieland, y viene a sumar al escenario del país otro anuncio que dejó en su contacto con la prensa argentina: “esperamos mantener la producción estable en los desarrollos del país”.

Una inversión menor a lo posible, y una producción que no crezca reflejan uno de los peores escenarios que podría esperar un país que tiene vastas reservas de gas en un momento en el que el mundo está ávido por ese hidrocarburo.

Es que Wieland fue claro: “Si no hubiera control de capital habría un incentivo para que hubiese más inversiones en Argentina y se favorecería el desarrollo energético” del país.

Y sumó: “Vemos que el gobierno ha tratado de esforzarse para dar incentivos en cambios de divisas y para proyectos de gas. Hay un porcentaje en esos casos que se puede utilizar de las divisas y es un paso positivo en la dirección correcta. Pero al final necesitamos acceso libre a los mercados como parte de los servicios que estamos requiriendo porque esto es solo para dólares estadounidenses. Anhelamos más pasos en esa dirección porque es algo que se necesita porque en otros lados se están pagando dividendos”.

«El gobierno está al tanto de los desafíos que tiene el sector energético, pero todavía hay cosas por cambiar”, enfatizó Wieland.


El offshore y Vaca Muerta


De todas formas, la firma continúa con los dos grandes focos de actividad que tiene el país: Vaca Muerta y el offshore en Tierra del Fuego.

Entre ambos puntos Wieland detalló que se invertirán 450 millones de dólares en los próximos 4 años, esto es 100 millones más que los anunciados a principios del año pasado a raíz tanto de los mayores costos que enfrenta la actividad a nivel global, como por el ajuste final de algunos proyectos.

El grueso de estos fondos de destinará a los bloques de Vaca Muerta Aguada Pichana Este (APE) y San Roque que son desarrollos en consorcio con TotalEnergies como operadora y Pan American Energy (PAE).
En esas áreas centradas en la producción de gas, las firmas sumarán un total de 20 pozos en los próximos dos años.

En el extremo sur del país, Wintershall DEA participa de otro consorcio con los mismos actores pero para el desarrollo offshore del bloque CMA-1. En esa área las firmas ya comenzaron a desarrollar el proyecto Fénix, una iniciativa que en total tendrá una inversión de 700 millones de dólares.

El desarrollo permitirá aportar 10 millones de metros cúbicos de gas por día a partir de 2025 y según precisó Wieland “avanza en los tiempos previstos, ya se está construyendo en Italia la plataforma y los trabajos locales también avanzan de acuerdo al cronograma”.


Hidrógeno, captura de carbono y GNL


Pese al enfoque de la firma a nivel global en iniciativas de captura y almacenamiento de carbono, Wieland remarcó que en Argentina y también en Latinoamérica en general faltan regulaciones para poder avanzar en esas iniciativas.

Aunque indicó que “avanzaremos con los proyectos que tenemos en Europa para poder aportar cuando podamos nuestro conocimiento”.

En tanto que desde la firma fueron tajantes en cuanto a la posibilidad de participar en desarrollos vinculados con la producción de gas natural licuado (GNL) en el país. “Para nosotros los proyectos se ven uno por uno en estos casos, y lo primero que hay que ver es el upstream antes que nada”, sostuvo Wieland, una aclaración en la que la decisión de la firma de mantener su producción estable en Argentina pone un claro límite.

Un segmento en donde se mostraron más entusiasmado es el de la producción de hidrógeno. “Para nosotros la transición energética es algo muy importante y enfocados en Argentina queremos desempeñar un papel fundamental con el conocimiento que tenemos, aportando nuestro conocimiento y por eso nos hemos asociado al Consorcio H2ar que se inició el año pasado”, marcó Wieland en referencia al espacio de desarrollo abierto por Y-Tec para el avance de proyectos.

Y aseguró que “lo importante de esta iniciativa es que es transectorial, y esa es la forma correcta y nos alegra muchísimo que ya nos estemos asociando”.


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