Habrá que caminar para llegar al balneario de Senillosa

La intendenta de Senillosa, Patricia Fernández, tomó la decisión de clausurar los accesos vehiculares a la costa del río Limay, en la zona denominada La Balsa.

Se destinará un sector reacondicionado para el estacionamiento de los autos y el ingreso será exclusivamente peatonal.
El aumento de la cantidad de bañistas que registró en los últimos años el sector del río Limay en la localidad de Senillosa, convirtió la costa en una zona peligrosa.

El continuo movimiento de rodados durante casi todo el día llevó a la jefa comunal a tomar la decisión de prohibir el ingreso para seguridad de los vecinos y turistas.

Mucha gente estacionaba sus autos a la orilla del agua para lavarlos, para no tener que cargar con bolsos, reposeras y mesas durante un largo trayecto o simplemente para evitar caminar. Así los posibles accidentes, sobre todo con niños, se potenciaban.

“Se informa que se realizó el cierre de los accesos vehiculares que conectan con la costa ribereña La Balsa, ya que la misma es para uso peatonal y no vehicular. Se deja libre así la costa del río para que sea utilizado como playa”, informó Fernández, a través de las redes sociales de la municipalidad de Senillosa.

“Se inició el emparejamiento de sectores para el estacionamiento de autos, ya que los mismos deben quedar en la zona que corresponde y no entorpecer la recreación y esparcimiento de los visitantes a orillas del río”, agregó.

Ayer desde la mañana, los vecinos de la localidad realizaron junto a trabajadores municipales, una campaña de reforestación de La Balsa, como parte del proyecto del municipio de revalorizar los espacios públicos que permitirán activar el turismo local.

Plantaron fresnos y aromos en la zona balnearia. De la Actividad participaron niños y adultos. La intendenta reclamó luego que cada visitante cuide los árboles y colabore con el riego del sector. Luego compartieron mate y tortas fritas.