Identidad de género en Chile

Tras media década de lucha en el Congreso, Chile aprobó el miércoles una ley de Identidad de Género que permite a las personas transgénero mayores de 14 años el cambio registral de nombre y género.

La norma posibilita modificar esta información registrada en su partida de nacimiento con un simple trámite en el Registro Civil. Entre los 14 y 18 años, los interesados necesitarán el permiso de uno de los padres o de un tutor, además del consentimiento de un tribunal de Familia.

El Movimiento de Integración y Liberación Homosexual, Movil, calificó en un comunicado de “histórico” el avance con la aprobación de la ley que “cambiará la calidad de vida de miles de personas”.

“Por cierto, lo de hoy es agridulce, pues la discriminación a menores de 14 años se traduce en más suicidios”, señaló uno de los fundadores y voceros del Movil, Rolando Jiménez.

La Cámara de Diputados votó el proyecto con 95 a favor y 46 en contra. La semana anterior había sido aprobado por el Senado con 26 sufragios a favor y 14 en contra. La oposición de centroizquierda logró la mayoría con el apoyo de cuatro votos oficialistas. La oposición, que controla la Cámara Baja, necesitaba dos votos más de los que tiene, pero la situación se resolvió por la ausencia de dos legisladores, que rebajó automáticamente el quorum requerido de 89 votos a 87.

Tras la votación, los diputados ultraconservadores Sergio Bobadilla y Juan Antonio Coloma anticiparon que acudirán al Tribunal Constitucional porque, según ellos, el proyecto “atenta contra el derecho de la identidad biológica de los menores de edad”.

El Tribunal Constitucional actúa en la práctica como una tercera cámara porque puede modificar leyes ya aprobadas por la Cámara de Diputados y por el Senado. Las personas transgénero suelen percibir a temprana edad que su cuerpo no responde al género al que sienten que pertenecen y generalmente son obligados a ponerse ropa y zapatos que rechazan y son discriminados en las escuelas, especialmente en el uso de los servicios higiénicos; en las consultas médicas y otros ámbitos de su vida.

Jimena Lizama, de la Fundación Iguales, que trabaja por la inclusión de la diversidad, declaró que los niños y niñas “también tienen derecho al reconocimiento de su derecho a la identidad… lo cual toma especial relevancia en esa etapa, por lo que seguiremos trabajando para que el Estado reconozca su identidad de género”. El Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh), que lucha por los derechos de las minorías hace más de una década, empujó esta ley tanto como el pasado gobierno de la expresidenta Michelle Bachelet. (AP )

Eva Vergara