Incidente con heridos en la Unidad de Detención 11

NEUQUEN (AN)- Miembros de la Asociación Zainuco denunciaron ayer ante la fiscalía que el viernes pasado se produjo una «violenta represión» en el pabellón 8 de la Unidad Penitenciaria 11 de Parque Industrial en la que resultaron heridos al menos tres internos, uno de ellos con un perdigón de balas de goma. Desde la dirección de Unidades de Detención replicaron que también hubo efectivos lesionados y que el personal presentó otra denuncia contra los internos por «amenazas y golpes».

Gladys Rodríguez, referente de Zainuco, relató que el enfrentamiento se originó cuando «uno de los muchachos tira en protesta la comida al piso y esto hace estallar una situación que venía ya tensa en el pabellón».

Según Rodríguez, tras un largo enfrentamiento, «a las 5 de la tarde se largó la represión en del pabellón; con lo que hay nueve personas sancionadas en los buzones y por lo menos tres heridos, a quienes les cortaron las visitas y no se sabe en qué condiciones están».

Junto a la denuncia por «apremios ilegales», los miembros de Zainuco presentaron elementos de prueba que les acercaron familiares de algunos detenidos. Se trata de una bata de baño naranja con tres orificios a la altura de la pierna y varios balines de goma. En uno de los hoyos de la prenda se aprecia la tapa de un proyectil, que quedó «pegada» a la tela.

El comisario inspector Ramón Canales, de la dirección de Unidades de Detención, admitió que hubo un incidente en el que fueron heridos tres internos; pero aclaró que también hay tres policías lesionados.

El comisario dio una versión distinta de los hechos. Contó que el motivo del incidente fue que tres internos se molestaron porque no les permitían salir a realizar tareas de limpieza y empezaron a arrojar basura al pasillo «en una actitud muy provocadora».

A la tarde, por la radio LU5, el director de Unidades de Detención, Hugo Rosas, ofreció otra versión: dijo que cinco internos tuvieron problemas con el resto de la población del pabellón, pero se negaron a ser trasladados a otro. Entonces ingresó el grupo de requisa para llevárselos por la fuerza.

Canales informó que el personal de la U-11 presentó una denuncia en la comisaría 20 porque recibieron amenazas y agresiones de los presos cuando intentaban calmarlos.

Según el comisario, a las 16.20 , cuando se intentó retirar del pabellón a los agresores, un grupo de 18 detenidos «empezó a romper los candados con palos y púas, y armaron barricadas con colchones para impedir el ingreso de la requisa».