La jueza dice que requisa en casa de los Noble Herrera fue “normal”

La jueza de San Isidro Sandra Arroyo Salgado defendió ayer el operativo de requisa de muestras genéticas de Marcela y Felipe Noble Herrera para saber si son hijos de desaparecidos, al negar que en la diligencia haya habido “un hecho de violencia o de exhibición de armas” y destacar que se buscó “preservar el pudor de las personas”. La magistrada dijo que los hijos adoptivos de Ernestina Herrera de Noble “se negaron a firmar” el acta judicial sobre el secuestro de sus prendas íntimas, pero remarcó que ese documento “es impecable, consta todo, y está firmado de conformidad por los dos letrados” defensores presentes en el lugar. Los abogados que presenciaron el operativo y, según la jueza, suscribieron el acta fueron Alejandro Carrió y Roxana Piña. Sin embargo, el letrado Ignacio Padilla, apoderado de Marcela y Felipe Noble Herrera, reiteró ayer que los tres fueron “perseguidos” por vehículos sin identificación durante el operativo de requisa. “Yo estaba en el mismo auto de Marcela y Felipe Noble y advertimos que nos estaban siguiendo, era una Cherokee verde y al menos una moto con dos personas vestidas de negro”, contó el letrado en declaraciones a radio Mitre. Padilla dijo que, al llegar a la casa de la madre adoptiva, Ernestina Herrera de Noble, advirtió “una cantidad enorme de policías, algunos estaban identificados otros no estaban identificados (…) eran gente fuertísimamente armada”. “Después cuando llega el otro automóvil (con los abogados Carrio y Piña) supimos que ellos habían sido interceptados, les preguntaron ‘¿Dónde están los Noble?’, les hacen bajar los vidrios y exhibieron las armas que tenían en ese momento”, aseguró. “Dentro de lo previsible” Padilla admitió que el operativo de requisa de prendas íntimas de Marcela y Felipe, dentro de la casa de la madre adoptiva de ambos, “se desarrolla dentro de lo previsible, ahí no creo que haya habido ningún exceso más allá del disgusto”. (DyN)


Exit mobile version