La UNC trabaja en un «superalimento»: snack saludable con frutas regionales
Buscan darle un valor agregado a la fruta imperfecta, que hasta el momento solo era captada por la sidra y el jugo. Proponen un alimento saludable compuesto de pera, manzana y kale.
La Fundación de la Universidad Nacional del Comahue para el Desarrollo Regional (Fundyder), con la Facultad de Ciencia y Tecnología de los Alimentos y la Subsecretaría de Ciencia e Innovación Productiva de Río Negro trabajan juntos en desarrollo tecnológico en procesos productivos para crear alimentos innovadores a partir de cultivos de importancia regional, como la pera, manzana y kale, en busca de un consumo saludable.
El proyecto, más conocido como ‘superalimento’, en relación a las enormes propiedades que están estudiadas del kale, como los altos aportes de vitamina K, vitamina C, hierro, proteína, calcio y ácidos grasos esenciales, como Omega 3 y Omega 6.
Así se vuelve un complemento importante para personas que buscan una alimentación saludable.
Como el kale tiene un periodo muy pequeño entre la cosecha y el consumo, como una variable en contra, desde la Facultad se ha impulsado un proyecto para posibilitar su conservación y consumo durante todo el año.
La directora del proyecto es la Dra. Adriana Caballero y los integrantes Carina Rosetani y Sebastian Chaile, integrantes del emprendimiento Delik, que se lleva adelante en la chacra 137 de Villa Regina.
En una primera etapa llevan adelante tres variedades de snack saludables con deshidratados de peras, manzanas y kale.
Fundación de la Universidad Nacional del Comahue para el Desarrollo Regional, que preside el rector de la Universidad, licenciado Gustavo Crisafulli, es la Unidad de Vinculación Tecnológica (UVT) que llevó adelante la formulación y seguimiento del Proyecto Federal de Innovación Productiva (PFIP) – COFECYT. También colaboraron la Agencia Provincial para el Desarrollo Regional (CREAR) y la Cooperativa Agropecuaria Girpat LTDA.
“Vimos que había una demanda de snacks saludables que no estaba cubierta, nosotros quisimos cubrir esa demanda con frutas y hortalizas y darle un valor agregado a la fruta de la región, que es fundamentalmente peras y manzanas, hasta el momento la única industria que los captaba era la del jugo y la sidra, le damos valor agregado a una fruta imperfecta y estamos produciendo alimentos a quienes quieren cambiar sus hábitos alimenticios”, explicó la responsable del proyecto.
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