Neuquén intenta salvar los eucaliptos del bulevar

NEUQUEN (AN).- Irán árbol por árbol, evaluarán la capacidad de recuperación de cada ejemplar, removerán las ramas muertas y mejorarán su estructura. Este relevamiento intenta el salvataje de los antiguos eucaliptos de los bulevares del microcentro de la ciudad y forma parte de la estrategia para el rediseño del arbolado urbano.

La decisión municipal de aceptar el apoyo técnico de docentes de la facultad de Agronomía dejó atrás el anuncio de despunte y extracción de la mitad de los eucaliptos. Las acciones serán sobre cada árbol en particular y tendientes a incrementar su vigor, reforzar las cuestiones de seguridad y preservar el valor histórico de los ejemplares.

Este acuerdo fue sellado entre docentes de la universidad y el subsecretario de Servicios Públicos Carlos Cides, en el cierre de una jornada maratónica realizada ayer que congregó a especialistas agrónomos y a organizaciones intermedias de Neuquén y de Cipolletti para abordar un único tema: la poda actual y la preservación de los eucaliptos.

Fue organizada por la comisión de Ecología y Medio Ambiente por iniciativa de su presidente, la concejal Emilce Troncoso (MPN).

Fuera del equipo municipal, no hubo profesional, docente ni asociación que apoyara la polémica poda de «rejuvenecimiento» practicadas en las plazas del microcentro. El concepto general fue que se han mutilado árboles extraordinarios con podas agresivas, se les acortó la vida útil y a varios se los puso en riesgo de muerte. Explicaron que la herida de un árbol podado a media rama difícilmente cicatrice, que ello favorece la invasión de plagas y al crecimiento desmedido de muchas ramas que desvigoriza al ejemplar y les imprime aspecto de plumeros.

«Lo que se hizo fue una poda excepcional, drástica, que podría ser considerada como un recurso previo a la extracción del árbol», insistió la ingeniera agrónoma María del Carmen Echenique, docente de la cátedra «Parques, Jardines y Floricultura» de la facultad de Ciencias Agrarias.

Su colega Ricardo González Junyent y el ingeniero agrónomo Norberto Raffo, ex funcionario político de la municipalidad, citaron una lista de aspectos negativos que justifican su no acuerdo con una poda de este tipo, en es

pecial por comprometer la vida útil del árbol.

La defensora del Pueblo Blanca Tirachini advirtió que seguirá trabajando en la defensa del arbolado urbano en la medida en que aluden a los derechos difusos de la sociedad.

En la misma sintonía, el director de Planeamiento y Ordenamiento de Espacios Verdes de Cipolletti, Adolfo Carmona, puso de ejemplo a su localidad sobre cómo abordar correctamente el arbolado de una ciudad. Sin embargo recibió críticas de una cipoleña que sufrió en carne propia la poda de un árbol.

El subsecretario Cides asistió acompañado por el director de Espacios Verdes Raúl Saenz y el ingeniero forestal Pablo Canziani, quienes tuvieron un papel más bien pobre a la hora de fundamentar técnicamente lo hecho. Es más, Saenz rompió el clima de disenso cuando leyó con la rapidez las razones que tuvo el municipio para actuar y cerró su lectura con que si se trata de usar al arbolado como «un trofeo político, sencillamente no tengo más que decir».