Polémica por los requisitos del plan de Valor Agregado Nacional

Las nuevas exigencias del programa que forma parte del Plan Gas Ar generaron una señal de alerta. La iniciativa es similar al Compre Neuquino pero aún no están claros  los alcances que tendrá.

Mientras el secretario de Energía de la Nación, Darío Martínez, reconoció esta semana que “este año será el más complicado” en lo que hace al aprovisionamiento de gas natural “porque largamos el Plan Gas Ar a fines del año pasado”, entre las empresas que se sumaron al programa comenzaron a caldearse los ánimos en torno al programa de Valor Agregado Nacional (VAN) que incorporó el nuevo esquema.

El eje de la discordia es un tema ya conocido y reñido dentro de la industria dado que el plan VAN es similar en la teoría al programa de Compre Neuquino que desde hace años posee la provincia que capitaliza a Vaca Muerta y que, si bien es cumplido, son muchas las empresas que lo hacen bajo objeción dado que consideran que se trata de una medida inconstitucional.

En concreto el plan de Valor Agregado apunta a potenciar la contratación de empresas regionales y nacionales dentro del nuevo Plan Gas Ar. Para ello, el sistema es similar al que aplica Neuquén: se le da prioridad a las firmas nacionales en las licitaciones para que por ejemplo, tengan la chance de igualar las ofertas presentadas por firmas internacionales para así ganar los contratos.

Pero el eje de la discordia en este caso radica en que cuando las empresas pusieron la firma en los contratos que forman parte del Plan Gas Ar, el Valor Agregado Nacional era más bien una idea declarativa que no estaba detallada en la normativa.

Desde diciembre se han realizado varios encuentros de la mesa VAN en los que por un lado las cámaras que nuclean a las pymes han solicitado que den a conocer todas las contrataciones realizadas para poder definir si se respetó su participación prioritaria, pero a la vez desde el gobierno nacional se habría planteado que algunos contratos ya firmados deberían ser revisados para, retroactivamente, buscar cumplir con estos requisitos.

“En el caso del Compre Neuquino los requisitos son claros, los conocemos y conocemos el mecanismo, pero acá con el VAN se firmó sin tener detalles y ahora desde el gobierno y las cámaras pymes están pidiendo cada vez más cosas, cosas que no se pidieron al principio”, explicaron desde una de las empresas adjudicatarias del Plan Gas Ar.

Otro de los cuestionamientos que las firmas hacen tiene que ver con los criterios disímiles entre el VAN y el Compre Neuquino, ya que el grueso de la actividad del programa se desarrolla en Neuquén. “Hay diferencias y no nos queda en claro si hay que cumplir lo que pide Neuquén o lo que ahora pide Nación”, explicaron.

Pero sin dudas hay un punto que no es menor en el cuestionamiento que hacen las productoras y que se plasmó el una nota de reclamo que la Cámara de Empresas Productoras de Hidrocarburos (CEPH) elevó a Energía días atrás: las firmas sostienen que muchas veces cuando optan por una empresa extranjera no es solo por el precio sino por la calidad y seguridad del servicio, un punto en el que remarcaron que de ser obligadas a contratar a firmas nacionales podrían terminar perjudicando la tan buscada eficiencia de sus operaciones.


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