Memoria selectiva: lo que recordás de chico puede decir mucho sobre tu cerebro hoy
Según estudios recientes, quien aún recuerda escenas como el repartidor de leche o el primer televisor a color, mantiene una memoria notable para su edad.
Un reciente estudio citado por Noticias Argentinas y publicado en geediting.com señala que ciertos recuerdos vívidos de la infancia —como el sonido de la leche servida en botellas de vidrio o la primera vez que se vio televisión a color— podrían ser un fuerte indicador de salud cognitiva en la adultez.
Recuerdos de infancia que fortalecen la mente
La investigación identificó al menos diez experiencias comunes de las décadas del 60 y 70 que, cuando son recordadas con nitidez, sugieren una memoria a largo plazo sólida y una estructura emocional bien preservada. Entre esos recuerdos se destacan también la sensación de marcar un número en un teléfono de disco, la ansiedad por revelar las fotos de un rollo, y la emoción de escuchar música en vinilos o ver por televisión la llegada del hombre a la Luna.
Los especialistas destacan que este tipo de evocaciones no solo apelan a la nostalgia, sino que son verdaderos indicadores de que las conexiones neuronales se mantienen activas y organizadas con el paso de los años. “Son señales de una memoria selectiva saludable, ligada a rutinas, emociones y estímulos multisensoriales”, explicaron.
En resumen, si todavía podés recordar con detalle escenas como el reparto diario de leche, las llamadas en teléfonos antiguos o la espera de tus fotos reveladas, es probable que tu cerebro esté conservando en buena forma su capacidad de retentiva. Un pequeño viaje al pasado que, según la ciencia, dice mucho del presente.memoria no envejece igual para todos.Un estudio apunta a que ciertas vivencias infantiles —desde el reparto diario de leche hasta las primeras transmisiones en color— son un indicador de salud cognitiva a largo plazo.
Con información de Noticias Argentinas
Comentarios