“No hay yeso en suspensión”, aseguran desde el municipio ante las quejas

Tras la difusión de un informe referido a los 10 años de acopio de yeso en la playa de maniobras del ferrocarril en J.J.Gómez. (“Diez años respirando un “aire blanco” y viviendo entre el polvo”) los residentes indicaron que están cansados de soportar el polvillo de yeso en sus viviendas, estropeando muebles y ropa.

Además señalaron que tienen que soportar las molestias que ocasionan los grandes camiones que llegan para descargar el material, que luego se carga en vagones del tren.

Este medio quiso conocer cuáles son las medidas de control que se llevan adelante de parte de la dirección de Medio Ambiente del municipio.

Su directora, Laura Juárez y el profesional técnico en medio ambiente, Luis Valdés, aseguraron que la actividad es controlada mediante monitoreos que se realizan en tres puntos: dentro de la playa de carga y descarga, afuera del predio y en el patio de una vivienda, justamente en la casa donde vive Eva Camú, una de las principales damnificadas.

“Se realizan dos monitoreos al año con un anemómetro. Este aparato mide las condiciones climáticas en que se realizó el control y la presencia o no de yeso y otras partículas en suspensión. Durante 48 horas se mide el material particulado y el ruido brindando una medición de la calidad del aire”, explicaron.

Agregaron que el material particulado se lleva a analizar y hasta el momento los niveles han dado normales. “Nosotros tomamos muestras del polvillo y lo enviamos a un laboratorio especializado en el tema de La Plata y da que no tiene composición de yeso. El informe dice que es tierra, que no hay yeso en suspensión. No fue detectado”, afirma la directora de Medio Ambiente, al tiempo que muestra las copias de los últimos controles realizados durante este año.

Por otra parte, destacaron que en los controles que realiza el área municipal se controla que no existan cargas superiores a los 25 camiones por día, lo que implica el ingreso de dos camiones por hora.

Dichos camiones deben usar lonas, circular por calle Félix Heredia e ingreso por una calle interna del predio del ferrocarril.

La empresa debe humedecer el área en forma permanente, sobre todo los días de viento con un regador y no trabajar los días en que el viento supere los 25 kilómetros por hora, respetando horarios de descanso de 14 a 16 y no trabajar luego de las diez de la noche.