Siguen buscando a los pescadores de Catriel, a dos semanas de su desaparición
La Policía continúa la búsqueda con presión, y con la necesidad de dar respuesta a sus familiares. Con buzos, lanchas, botes y un avión de Prefectura, todavía no hay resultados.
A dos semanas de la desaparición del bote en el que tres pescadores de Catriel se embarcaron en el embalse Casa de Piedra, la situación es angustiante. La Policía de La Pampa continúa la búsqueda con presión, y con la necesidad de dar respuesta a sus familiares. El miércoles 2 de este mes dieron con el cuerpo sin vida de Eduardo Aranguez, y resta dar con Darío Aranguez (31 años) y su sobrino Moisés Durán (44 años).
A 14 días de iniciados los trabajos, siguen trabajando los buzos, botes, lanchas y un avión que hace varias pasadas cuando el clima lo permite.
«No tenemos nada», dijo con pesar el comisario Juan Anibal Mercado, jefe de la regional IV de La Pampa. «La búsqueda continúa, y tendremos que caminar sobre lo caminado, para ver si el agua saca algo para la costa», explicó.
De momento cuentan con tres buzos, más otros dos que llegaron desde Santa Rosa, cerca de seis embarcaciones, entre botes, lanchas y gomones, y el avión de Prefectura, que realiza varias pasadas diarias.
Familiares de los desaparecidos se acercan a diario, tratan de colaborar con las tareas que lleva adelante la Policía, caminan por la costa y esperan un resultado para dar cierre a la desesperante situación.
«Francamente estamos desorientados», reconoce el comisario. «Tratamos de seguir buscando igual que el primer día, pero es una situación muy angustiante, sin embargo no perdemos las esperanzas», relató. Durante el tiempo que lleva a cargo de la regional, no recuerda un antecedente de estas características.
Se trata de un lago artificial, con sectores de mucha vegetación, tamariscos, árboles, y sectores rocosos e intrincados. Un terreno difícil para una búsqueda de estas características.
Durante los primeros días, tras el hallazgo del cuerpo sin vida de Eduardo Aranguez, encontraron una mochila que contenía los celulares de los tres pescadores, un par de borceguíes, una caña de pescar y zapatillas de color gris. También hallaron una tabla, que se especulaba sería de la embarcación, pero eso no pudo ser confirmado.
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