Sólo el trajinar del «Kily»

El polifuncional Cristian "Kily" González fue, con siete puntos, lo más rescatable en el plano individual del seleccionado argentino de fútbol, rubro en el que hubo varias y llamativas notas bajas.

Roberto Bonano (5): En la primera jugada del partido hizo un mamarracho que casi le cuesta el gol, al salir como un novato en un largo pelotazo que no observaba peligro. Lo que no pudo evitar fue ser amonestado.

Roberto Ayala (5): Bolivia atacó con un solo delantero, Botero, y las pocas veces que éste entró en juego lo complicó. Casi le hace penal en el segundo tiempo y además se lo notó nervioso algo que muy pocas veces le falta. Lejos de su nivel

Roberto Sensini (6): Tras una primera media hora se flaqueza, se recuperó y terminó bastante firme. De los del fondo fue lo mejor y hasta a punto estuvo de hacer un gol, pero una gran intervención del arquero boliviano lo impidió.

Wálter Samuel (4): En el primer tiempo no pudo frenar ninguna incursión ofensiva del rival, que atacó únicamente por su lado. Mejoró, vaya obviedad, cuando Bolivia dejó por completo de transitar su zona. Hace tiempo que ha bajado sensiblemente su nivel, ayer dudó mucho y jugó demasiada veces hacia atrás complicando a sus compañeros.

Javier Zanetti (4): Desconocido, salvo excepcionalmente, careció de sorpresa y de eficacia tanto en defensa cuanto en la proyección. Esta vez le faltó personalidad para sumarse al ataque, teniendo en cuenta que tenía espacios de sobra para hacerlo.

Diego Simeone (4): Flojo. Perdido en la cancha y sin comprometerse casi nunca en acciones ofensivas. Nada que ver con la versión «Cholo» de su club Lazio ayer se complicó demasiado con sus pases y no fue el patrón del mediocampo que estamos acostumbrados a ver.

Juan S. Verón (5): Primer tiempo para el olvido. Luego mejoró y se convirtió, aunque tarde, en el pivot-conductor que tanto necesitaba su equipo. Sólo lo salvaron del papelón dos tiros libres, una la sacó el arquero y el otro se fue por muy poco.

Cristian González (7): El mejor. Sin deslumbrar ni mucho menos, fue el más claro, el más punzante y el que «leyó» mejor el juego, o la maraña impuesta por Bolivia. Sigue en muy buen nivel.

Ariel Ortega (4): Pura insinuación. Lo mejor fue intentarlo siempre y un pase gol a Zanetti en el primer tiempo. Por lo demás, fue absorbido por la marca y por su propia impotencia. Otra vez quedó lejos de ser el socio ideal de Batistuta.

Gabriel Batistuta (4): La gran decepción de la tarde. Erró muchísimo, anduvo peleado con él mismo y se mostró muy impreciso con la pelota. Dos tiros libres mostraron su sello, pero en los colectivo poco, muy poco.

Claudio López (6): Fue importante en el desmarque, en el trajín y también en la recuperación. Pero para lo que estaba, el gol o el abastecimiento para el gol, falló.

Gustavo López (5): Ingresó por Zanetti y aportó algo más de claridad. Fue el autor de un golazo cuando Argentina estaba muy desesperada por llegar al gol.

Pablo Aimar: jugó los últimos diez minutos y no le alcanzaron para mostrarse y ayudar al equipo.

Una muralla en el arco boliviano

José Carlo Fernández (9): la figura de Bolivia y del partido, muy seguro por arriba y abajo. Respondió siempre. Si Argentina no ganó por más de un gol él fue el responsable. Tapó cuatro situaciones claras de gol.

Juan Manuel Peña (6): fue el más retrasado de los del fondo, pero cubrió las espaldas de todos sus compañeros.

Renny Ribera (5): batallador incansable. Corrió a cuanto argentino estuviera cerca. Falló en la función de salida, sin su presencia Bolivia no tuvo sorpresa.

Marcelo Carballo (4): Rústico en la marca, pero además pegó mucho y se fue expulsado.

Marco Sandy (6): otra de las columnas defensivas de Bolivia. Ganó y perdió contra Gabriel Batistuta. De arriba fue casi impasable cuando Argentina se reiteró con los centros.

Iván Castillo (4): arrancó como salida por el sector izquierdo, pero terminó siendo un elemento más en el andamiaje de la defensa. El esquema ultradefensivo lo obligó a quedarse en su sector

Julio César Baldivieso (5): demostró que con la pelota sabe mucho, aunque esta vez estuvo muy lejos de ser el armador de otras jornadas. En el medio estuvo muy solo y arriba no tuvo compañía.

Luis Cristaldo (6): en el primer tiempo fue lo mejor de Bolivia. Marcó y apoyó, fue la salida clara de su equipo. En el complemento colaboró con la defensa y se olvidó del arco rival.

Marco Antonio Etcheverry (4): un par de tiros libres de su sello y después muy poco. Sólo intentó retener la pelota para tratar de colaborar con el reloj.

Roger Suárez (5): fue otro de los que luchó muchísimo. Se perdió un gol increíble en el segundo tiempo. Lo sacaron porque estaba muy cansado.

Joaquín Botero (5): tiene condiciones de maratonista; corrió y complicó a toda la defensa argentina. Terminó fundido porque participó en todas las jugadas.


Formá parte de nuestra comunidad de lectores

Más de un siglo comprometidos con nuestra comunidad. Elegí la mejor información, análisis y entretenimiento, desde la Patagonia para todo el país.

Quiero mi suscripción

Comentarios