«Tengo muchas ganas de volver», dijo Pablo

Pablo Saldías, el chico que sufrió las heridas más graves en la tragedia de Carmen de Patagones, le dijo ayer al ministro de Educación, Daniel Filmus, que tiene «muchas ganas de volver a la escuela». Saldías expresó su deseo en unas de las primeras palabras que pronunció tras salir del estado de coma farmacológico en el que se encontraba desde hace una semana a raíz de los tres disparos recibidos durante el ataque a tiros por parte de su compañero.

En la sala de terapia intensiva del hospital de Viedma, el ministro se acercó a la cama de Saldías, le dio un beso en la mejilla y le expresó: «Estoy muy contento porque los médicos me dijeron que estás muy bien».

El joven, que ayer pudo incorporarse en la cama y sigue su proceso de evolución, le contestó sonriendo: «Tengo muchas ganas de volver a la escuela».

En el momento de la visita, Federico Torres, el otro estudiante internado en el hospital, estaba durmiendo y Natalia Salomón, que se encuentra en sala general de pediatría, conversaba con una psicóloga, por lo que Filmus no quiso interrumpirlas.

El ministro visitó el hospital en compañía del director de Educación y Cultura de Buenos Aires, Mario Oporto; el intendente de Patagones, Ricardo Curetti, y directivos del centro de salud. Los padres de las víctimas fatales dijeron estar «muy satisfechos» por las reflexiones del ministro Filmus.

«Estoy muy agradecido por la visita del ministro y el saludo del Presidente, pero lo importante es lo que ahora se puede lograr, los cambios que hay que hacer y que están expresados en el petitorio» dijo a Télam Tomás Ponce, padre de Federico, uno de los tres chicos muertos. (Télam)

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