Una denuncia por violencia sacó a la luz una interna en la CEB

Walter Cortés atacó a la dirigencia de la cooperativa. Dijo que no defenderá a los referentes de su entorno si cometen errores en la entidad. El trasfondo: la puja por la conducción.

La denuncia por violencia y maltrato hacia dos mujeres trabajadoras de la Cooperativa de Electricidad Bariloche (CEB) desató la furia del dirigente sindical Walter Cortés que denunció una serie de irregularidades en la entidad y se desvinculó de la conducción.

Cortés fue denunciado públicamente por trabajadores de la CEB y referentes de la oposición en el Consejo de Administración, por ejercer violencia hacia dos mujeres en la sede de la entidad, de las cuáles una de ellas, que cursa un embarazo de siete meses, debió ser hospitalizada por una descompensación.

El episodio ocurrió el viernes pasado y generó el repudio de un amplio sector de trabajadores de la CEB y también del Consejo de Administración que inició una investigación interna y manifestó al sindicalista su preocupación por lo sucedido, además de acompañar a los trabajadores.

Ayer Cortés dio su versión de los hechos y pidió “disculpas” a las dos mujeres “si se sintieron afectadas”. Vinculó el hecho al “fragor de una discusión gremial” pero también asoció esta exposición pública del caso como parte de una “interna política”.

Recordó que existen dos causas penales por abuso sexual a dos trabajadoras del área de maestranza y dijo que en esos casos “ninguno de los que firmó ahora salió a repudiarlo”.

Cortés, como secretario general del gremio mercantil, representa a unos 70 trabajadores de la CEB que están bajo convenio comercial y que conviven con empleados encuadrados en el Sindicato de Luz y Fuerza. Además el dirigente es un histórico referente de la lista Roja, que conduce la CEB hace 15 años, y tres consejeros titulares responden a su figura.

Un quiebre interno en la conducción de la CEB quedó expuesto tras los dichos de Cortés quien se desvinculó de “manejar un sector” y “dar directivas” en la CEB y dijo que los dirigentes vinculados a Comercio que están en la entidad lo hacen por “militancia política”. Los consejeros titulares de su sector son Dana Guzmán, Carlos Criado y Martín Domínguez.

“Si se equivocan pagan por sus errores, yo no voy a defender a ninguno, ni encubrir a nadie cuando eso trae perjuicio a los que represento que son los trabajadores mercantiles” advirtió el sindicalista.

En la CEB está en juego la futura conducción porque este año vence el mandato de dos referentes históricos como el presidente Jorge Perrella y el expresidente Rodolfo Rodrigo, quienes anunciaron su alejamiento por acogerse a la jubilación. La puja por la conducción, según la estructura que desde hace años conduce la CEB, quedó entre el sector de Cortés y el que lidera el exdiputado Hugo Castañón. También la opositora lista Blanca tiene intenciones de crecer en la representación interna.

Ayer el gremialista apuntó a la conducción de la CEB sin ninguna salvedad de los dirigentes que llegaron a la conducción de su mano. “En la CEB pasan situaciones horrorosas producto del mal manejo interno, producto de la falta de dirección y producto de la anarquía”, enfatizó Cortés rodeado de dirigentes de su sindicato.

“Veo en el Consejo Directivo que no hay reacción, dicen que soy socio de Castañón pero la hija andaba buscando las firmas (para la denuncia por violencia)”, afirmó.

Denunció persecución y discriminación en la CEB, y habló de “trabajadores de primera y de segunda” con amplias diferencias salariales entre los empleados bajo convenio mercantil, que perciben sueldos de 32.000 pesos y los que responden a Luz y Fuerza, que tienen salarios por encima de los 100.000 pesos.

Respecto a este gremio también señaló cierta sintonía con la conducción de la entidad al denunciar que se contrató recientemente más personal que responde a Luz y Fuerza: “si estamos en déficit donde nuestra gente no puede pagar la luz porqué tienen que meter más gente o hace tanta falta gente en la CEB” se preguntó y apuntó de manera directa al secretario general de ese gremio, Gabriel Prieto.

También cuestionó el interés político de los consejeros de la oposición Luis Barrales y Carlos Aristegui, en la exposición pública del caso de maltrato.


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