Lo vuelven a imputar por intentar matar a su pareja

Lo vuelven a imputar por intentar matar a su pareja

Los gritos desesperados de María Ñancufil envuelta en llamas sorprendió la tarde del 8 de mayo pasado a los pocos vecinos de la calle Prayel, en el barrio El Frutillar. La mujer intentaba sacarse la ropa que le quemaba el cuerpo hasta que un vecino pudo socorrerla. Después, fue trasladada hasta el hospital Ramón Carrillo donde estuvo varias semanas internada en terapia intensiva hasta que se recuperó. Las sospechas apuntaron a su pareja, Luis Cuyul Bustamente, que discutió esa tarde con Ñancufil. Pero la investigación que fiscales de la Unidad Fiscal Temática 1 llevaron adelante no arrojó pruebas contundentes contra el sospechoso, recordaron ayer fuentes judiciales.

Así, el juez de Instrucción Marcos Burgos dictó, en principio, la falta de mérito para el hombre de 43 años y dispuso su liberación. Además, ordenó varias medidas para profundizar la investigación. Meses después, Burgos sorprendió con una resolución polémica: dictó el sobreseimiento de Cuyul Bustamante. El fiscal Martín Govetto apeló la decisión de Burgos.

Ayer, los jueces de la Cámara Criminal Primera resolvieron hacer lugar al recurso de apelación que sostuvo el fiscal de Cámara Martín Lozada y revocaron el sobreseimiento. Es más, apartaron a Burgos y ordenaron que otro juez de Instrucción dicte el procesamiento del imputado, que está en libertad desde el año pasado.

Lozada objetó el fallo de Burgos porque advirtió que testigos declararon que la mujer no quiso quitarse la vida ni autolesionarse. Sostuvo que testigos aseguraron que cuando Ñancufil fue auxiliada por vecinos apuntó con el dedo índice a su pareja. Y recordó que había antecedentes de violencia de género de la que era víctima Ñancufil. “Esto es un eslabón más en una larga cadena de violencia”, sostuvo Lozada.

El defensor oficial Marcos Ciciarello señaló que la mujer tenía antecedentes psiquiátricos e intentos de suicidio. Dijo que la mujer declaró ante el juez que no recordaba nada. Sostuvo que los policías que fueron al domicilio donde ocurrió el hecho la tarde del 8 de mayo del año pasado, en el barrio El Frutillar, aseguraron que la mujer apenas había balbuceado algo. Recordó que la misma Cámara Criminal Primera confirmó la falta de mérito cuando analizó una apelación.

Ahora, los jueces de la Cámara Criminal Primera afirmaron que Burgos se equivocó porque el criterio para sobreseer a un imputado debe ser en base a certezas. Ayer, valoraron testimonios de testigos, de policías e informes médicos “para tener acreditado el hecho con el grado de probabilidad que requiere esta etapa”. Ahora, otro juez deberá seguir adelante con la causa.

El hecho

El hecho que se le atribuye a Cuyul Bustamente ocurrió, según la acusación fiscal, alrededor de las 16 del 8 de mayo de 2016, en el domicilio de la víctima ubicado en el barrio El Frutillar de esta ciudad.

En circunstancias de una discusión de pareja, en el interior del domicilio, el imputado tomó una botella de un líquido combustible, que roció sobre Ñancufil, de 50 años, y la prendió fuego intentando darle muerte. Un vecino intervino, logró apagar el fuego y salvó a la mujer, que sufrió lesiones graves como consecuencia de las quemaduras en el tórax, abdomen, axilas, rostro y cuero cabelludo.