El odioso cruce de cada día a Neuquén

Aún no ha amanecido en el Alto Valle de Río Negro y Neuquén y ya cientos de cipoleños se encuentran sobre la Ruta 22.

La mayoría hace este recorrido para ir a trabajar a la vecina capital, otros para hacer trámites, compras y hay quienes van a recibir asistencia médica. Todos lo hacen por diferentes causas y lo que los une es vivir a diario la misma odisea: la de cruzar uno de los puentes carreteros para ir a Neuquén.

“Está intransitable”, “Es imposible cruzar a esa hora”, “Necesitamos otro puente”, son algunas de las frases populares que resuenan por las calles cipoleñas. Y la evidencia está a la vista: mientras año a año más autos circulan por el Alto Valle siguen haciéndolo por una misma ruta y los mismos puentes.

Es por eso que se espera que el tan prometido Tercer Puente sea inaugurado este año como fue anunciado (Ver aparte). Esta sería una alternativa que ayudaría a que la circulación sea más fluida.

Uno de los grandes factores que ha influido en el caos vehicular es que en los últimos años se ha acrecentado notablemente la cantidad de autos que circulan a diario por el Alto Valle, mientras que los dos puentes carreteros siguen siendo la opción más utilizada para transitar entre Cipolletti-Neuquén.

Antes de las 7 de la mañana no existen mayores inconvenientes para transitar debido a que a esa hora son muy pocos los automovilistas que circulan, por lo que no significa una travesía cruzar por los puentes.

La verdadera aventura comienza unos minutos después cuando lo único que sirve para poder llegar sanos y salvos a sus destinos es armarse de paciencia.

El horario más complejo es entre las 7 y las 9. Es cuando miles de conductores quieren atravesar el puente carretero con dirección a Neuquén.

Es el horario pico cuando se puede observar una fila de vehículos, que termina por fundirse en el horizonte. Todos tienen el mismo objetivo y el mismo deseo: llegar lo antes posible a la capital neuquina.

Las maniobras arriesgadas

Algunos optan por sobrepasar a otros vehículos por las banquinas, hay quienes van en moto y pasan entre los autos para salir más rápido, pero lo cierto es que en menos de 20 minutos no podrán hacerlo.

Tampoco falta quienes eligen como medio de transporte la bicicleta. Ellos resultan ser los más beneficiados ya que pueden transitar sin mayores inconvenientes porque pueden hacerlo por la bicisenda.

Esto quedó reflejado en un estudio de la Organización Ciclistas Urbanos Confluencia donde concluyó que el medio de transporte más económico y rápido para viajar entre esta ciudad y la capital vecina es la bicicleta.

La experiencia se realizó en diciembre del año pasado cuando integrantes de la organización decidieron saber qué medio de transporte era el más apto para viajar a Neuquén.

Tuvieron en cuenta sus costos y tiempo. Concluyeron que la manera más rápida de cruzar los puentes era en bicicleta, luego en tren, le seguía el auto y, por último, el medio con que más se tarda en llegar es el colectivo.

Por su parte, el jefe de la división Tránsito, Miguel Ángel Elifonso, aseguró que el mayor caos vehicular se genera en la rotonda de ingreso a esta ciudad y que se debe a que en ella confluyen conductores que vienen de diferentes localidades del Alto Valle. “Es en la rotonda de ingreso a Cipolletti donde deben tener especial cuidado para no chocar”, señaló Elifonso. (Ver aparte)

Antes del horario pico

Algunos optan por ir antes a Neuquén para no tener que enfrentarse al caos de la Ruta 22.

Este es el caso Jorge Araneda que trabaja para un conocido estudio jurídico de la ciudad y que por su trabajo debe viajar a Neuquén todos los días. Lo hace para llevar documentación. Todos los días se enfrenta al desafío de tener que cruzar los puentes carreteros. Tantas veces tiene que hacerlo que ya conoce los horarios picos y hasta sabe de algunas claves para evitar las largas hileras de autos. “Hay que cruzar temprano. Yo paso cerca de las 7 y no hay casi nadie. Después ya es un infierno. Además termino llegando tarde a todos lados”, indicó.

Además cree que el problema radica en la falta de orden en el tránsito y sostiene que una buena solución sería poner más agentes sobre la Ruta para agilizar el tránsito. “Uno de los problemas es que los vehículos que ingresan por Ruta Nacional 151 no respetan a los que lo hacen por calle Pacheco. Esto genera que se forme un triple carril que ocasiona un cuello de botella que deriva en que algunos vehículos se rocen”.

El tren, una opción

Una de las opciones más elegidas para viajar hasta Neuquén es el tren. El horario más popular es el de las 7.25. Es justamente cuando pueden verse los vagones llenos. Muchos lo han elegido debido a que es económico y que en sólo 20 minutos llega a la capital neuquina sin haber realizado una sola parada y sin mayores inconvenientes.

No importa que hayan cortado los puentes, que estén arreglando la Ruta 22 o que haya habido un accidente que obligó a cortar el tránsito ya que quienes viajan en tren saben que pese a cualquier obstáculo llegarán en horario a su destino.

“Hay que cruzar temprano. Yo paso cerca de las 7 y no hay casi nadie. Después ya es un infierno”.

“Los vehículos que ingresan por Ruta 151 no respetan a los que lo hacen por calle Pacheco. Esto genera que se forme un triple carril que ocasiona un cuello de botella”.

Un cipoleño que por su trabajo cruza los puentes a diario.

La ong Ciclistas Urbanos Confluencia hizo un estudio donde definió que la bici es el medio más rápido y económico de viaje entre las dos ciudades.

“Lo más difícil es cuando chocan dentro de los puentes porque debemos parar el tránsito y esto genera mucha impaciencia”.

Miguel Angel Elifonso, jefe de la División de Tránsito Zonal.

El tránsito de hora pico