“Lo importante no es la pena sino los fundamentos del fallo y los alegatos”

NEUQUÉN (AN).- Orlando “Nano” Balbo fue secuestrado a las 9 de la mañana del 24 de marzo de 1976. Lo torturaron hasta hacerle perder la audición, que hoy padece; estuvo varios años en la cárcel; logró el exilio; con la democracia regresó al país. En el juicio La Escuelita II dio un conmovedor y clarísimo testimonio, con un análisis profundamente humano, desprendido del más absoluto revanchismo.

A continuación algunas de sus reflexiones a 40 años del golpe militar.

“Los juicios, con las consignas de memoria, verdad y justicia, son vitales. Pero la memoria es el pasado, que viene a interpretar fuertemente al presente para poder construir el futuro”, dijo.

Opinó que “la memoria es un concepto dinámico, no la podemos meter en los museos porque se cristaliza, se cosifica y entonces no construye futuro. Evita que se caiga en el olvido, pero eso no es memoria”.

“Los juicios son memoria, con todo lo que se peleó para que se hicieran a pesar de todos los obstáculos que se pusieron, desde los jueces que se negaban a actuar y cuando lo hacían lo asumían contra su voluntad”, comentó.

“Pero para mí lo más importante de los juicios no es la pena. Quiero condenas, sí, porque si no hay impunidad, pero lo más importante de los juicios son la fundamentación de los fallos y los alegatos de la querella y la fiscalía”, sostuvo.

Agregó que “es la fundamentación porque hay una institución jerarquizada del Estado que da cuenta de qué es lo que pasó. Y eso, cuando pasen los años, algún estudiante de derecho lo va a sacar para explicarse qué fue lo que pasó. Es el poder del Estado, es la Justicia la que lo explica, a través de los fundamentos del fallo y los alegatos de fiscalía y querella”.

Respecto de las motivaciones del golpe dijo que los argumentos que dieron los militares eran falsos. “La deuda era de 6 millones de dólares y hoy se está firmando un acuerdo por cifras siderales; la guerrilla ya había perdido consenso con la democracia y había disensos internos en las organizaciones; de que el gobierno estaba superado, lo cierto era que en seis meses se iniciaba la campaña para las elecciones. Lo concreto es que el golpe se dio para instalar un sistema económico que de otra manera no se hubiera podido instalar, por el nivel organizativo de los trabajadores que lo iban a resistir”.

Comentó que la represión había empezado antes del 24 de marzo y la resistencia fue de antes, ante el accionar de la Triple A, que comandaba el entonces ministro de Bienestar Social José López Rega.

“En el golpe también participó la sociedad civil, porque en el país eran muchos los intendentes, si mal no recuerdo más de 800, que respondían a partidos políticos. Incluso el Partido Comunista, que decía que había que apoyar a Videla porque no era pinochetista…”, describió en cuanto a la responsabilidad que le cupo a una gran cantidad de sectores de la sociedad. (AN)

Implementaron el segundo genocidio del país los mismos que habían perpetrado el primero: la Conquista del Desierto. Y si no miremos los nombres: Martínez de Hoz…


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