Neuquén: Las textiles preparan su traslado al nuevo predio

Las 36 obreras textiles de Neuquén comenzaron a contar las horas para oficializar su traslado al nuevo predio del Parque Industrial, donde van a producir con la cooperativa que conformaron “Newen Traful”.

Indicaron que mañana se cobrarán todas las indemnizaciones y que, una vez depositados los montos correspondientes, concretarán la mudanza definitiva a las instalaciones de la empresa rosarina Proseind, que además absorberá parte de lo elaborado.

Desde mediados de la semana pasada, e incluso durante el transcurso de la jornada de hoy, las mujeres se dedicaron exclusivamente a desmontar las máquinas y el poco mobiliario aún que quedaba en su viejo lugar de trabajo, que se ubica a a la altura del kilómetro 3 de la ruta provincial 7.

“Está todo inventariado y listo para el traslado, la mudanza se va a hacer con camiones va a enviar el gobierno provincial, algunas máquinas ya las llevamos”, señaló la abogada de las trabajadoras, Natalia Hormazabal.

Hoy se cumplieron 278 días del conflicto. Pese al desgaste que provocó la toma del predio de la empresa Textil Neuquén durante todo estos meses, la incertidumbre sobre la continuidad de su fuente laboral y la falta de un sustento económico, las mujeres se mostraron esperanzadas con el nuevo proyecto.

Esta mañana había sentimientos encontrados entre las obreras: “nos da nostalgia, porque pasamos 10 años trabajando en este lugar”, señaló Sandra Arias.

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Nostalgia fue también la palabra que utilizó Marina Catilao para describir el momento, y que empujó algunas lágrimas por su rostro. Catilao es la delegada de las trabajadoras y fue la cara visible de las obreras durante todo el conflicto.

“Estamos muy contentas y orgullosas de la pelea que hemos dado estos casi 10 meses. Las obreras textiles tenemos que decir que estamos agradecidas, no solamente de los sectores trabajadores, organizaciones políticas y sociales, sino también a la comunidad, por la solidaridad que han tenido con nosotras y nuestras familias”, expresó Catilao y agregó que “estamos orgullosas de esta lucha, porque nadie nos regaló nada, ni los empresarios, ni el gobierno, se los arrancamos con la lucha”.

“Nosotros nunca confiamos en los empresarios, ni en el gobierno, porque nos costó que entraran en el conflicto para dar una solución”, puntualizó Hormazabal. Aseguró que con la recuperación de las máquinas, las obreras, “nunca más van a volverse a encontrar en una situación así, siempre van a tener sus herramientas de trabajo y son obreras calificadas”.