Juicio por Solano: la querella ratificó hipótesis de homicidio

Sin la presencia de Gualberto Solano, padre del joven trabajador salteño desaparecido en 2011, se realizó ayer en la Ciudad Judicial la segunda jornada del juicio contra siete policías por la “desaparición forzada” y “homicidio” de Daniel Solano.

La requisitoria del querellante fue el tema de la jornada, lectura que llevó más de más de seis horas e incluyó tres cuartos intermedios. Recesos largos y un expediente muy prolongado, marcaron la segunda audiencia en la que los imputados se mostraron más que relajados desde el banquillo de acusados.

El padre de la víctima, Gualberto Solano, habría sufrido el miércoles un fuerte dolor de cabeza en su vuelta a Choele Choel por lo que no se presentó en esta audiencia, según explicó el abogado Aparicio. “Gualberto tiene un antecedente de ACV por eso tomamos la precaución de que no estuviera hoy para preservar su salud”, argumentó.

En la acusación de la querella, instancia que demandó casi toda la audiencia, el equipo conformado por Sergio Heredia y Leandro Aparicio explicaron, en la requisitoria que se hizo pública ayer, que “Daniel Solano fue víctima de una estafa laboral y posterior homicidio”.

La familia Solano sostiene que fueron los dueños de la empresa dedicada a la contratación de mano de obra “Agro Cosecha” (Pablo Mercado y hermanos Adrián y Gustavo Lapenta) quienes como miembros de una asociación ilícita compuesta también por funcionarios de la justicia y de la policía; habrían ordenado el homicidio del joven trabajador a un grupo de policías que como sicarios, quienes habrían llevado adelante la ejecución.

La próxima audiencia será el martes 6 de marzo donde se espera que comiencen a declarar los testigos presentados por la Fiscalía y la querella.


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