5 películas sobre bodas que no te podés perder

Mañana, Meghan y Harry serán los protagonistas de una boda real (con tantos cambios de actores que ya parece una película, convengamos, porque a 24 horas de la boda, están decidiendo quién lleva a la novia a al altar).

En fin… esos son problemas de la realeza.

Nosotros, que no estamos invitados, bien podemos mirarlos mañana por la tele. O disfruta de otras bodas de pantalla grande:

El casamiento de Muriel

Si querés sonreír, este es el filme. Repleto de canciones de Abba, significó

Muriel (Toni Collette) vive en una pequeña población australiana llamada Porpoise Spit, un lugar repleto de centros comerciales, parques acuáticos y reuniones de Tupperware.

Muriel considera que la vida allí es de lo más aburrida. Pasa los días en casa escuchando música de ABBA y soñando con el día de su boda.

El problema es que no ha tenido nunca un amigo que se haya podido considerar un pretendiente, ni ha salido nunca con un hombre a solas.

Cansada de esperar, y de que se burlen de ella, decide irse a la ciudad, vivir otra vida y encontrar a alguien.

Año bisiesto

No parecen destinados. Ella, Anna Brady (Amy Adams) es en esta película una típica chica de gran ciudad (Boston en este caso) que llega a Gales por casualidad y desprecia casi todo lo que hay ahí. Y a él, Declan (Matthew Goode), dueño del lugar en el que ella se queda, Anna no puede caerle peor.

Pero, como suele ocurrir en estas historias, el diablo mete su cola…

Lo cierto es que ella llega a Gales de casualidad y deseando que su novio desde hace cuatro años, Jeremy (Adam Scott), le pida el matrimonio. Pero una tormenta la hace llegar a Gales en lugar de Dublin, donde está su novio. Y entonces sí, Anna deberá pedirle a Declan que la lleve hasta la ciudad donde se encontrará con su novio que -ella supone- le propondrá matrimonio.

27 bodas

Por mucho tiempo, Katherine Heigl fue “la” reina de las comedias románticas. Y esta fue rodada en su esplendor.

Jane Nichols (Heigl) ha sido dama de honor en 27 bodas. Una noche cuando está asistiendo a dos bodas simultáneamente, conoce a Kevin Doyle (James Marsden), un periodista que se ocupa de escribir sobre bodas, aunque aspira a convertirse en “periodista serio”. Cínico en su visión del matrimonio, Kevin se burla del mundo rosado que habita Jane.

Y ya sabemos cómo funcionan las comedias románticas… todo puede enredarse… Para mejor.

La boda de mi mejor amigo

A sus 27 años, Julianne Potter (Julia Roberts) es una crítica neoyorkina de restaurantes que se encuentra con un amigo de toda la vida llamado Michael O’Neal (Dermot Mulroney), quién le confiesa que va a casarse con Kimberly Wallace (Cameron Díaz).

A partir de entonces descubre que está enamorada de él y, junto a su mejor amigo George (Rupert Everett), decide evitar la boda a toda costa.

La película fue un éxito comercial y de crítica. La canción “I Say a Little Prayer (For You)” fue grabada por Diana King y presentada emblemáticamente en la cinta, convirtiéndose en un top 20 en el Billboard. La banda sonora presentó canciones de la dupla Burt Bacharach/Hal David.

Destination Wedding

Keanu Reeves y Winona Ryder protagonizan esta película de Victor Levin (guionista y productor ejecutivo de la sitcom “Mad About You”) que los vuelve a unir en la pantalla grande.

En la comedia romántica, Ryder interpreta a Lindsay, una mujer que es invitada a una boda en California, y que tiene sentimientos hacia el novio. Reeves se pone en la piel de Frank, un hombre taciturno y renegado que no cree en el amor.

Ambos se conocen en el aeropuerto, camino a dicho casamiento, y comienzan su vínculo con el pie izquierdo, para luego percibir que tienen más cosas en común de lo que creían.

Destination Wedding es la cuarta película juntos de Winona y Keanu. Además de Drácula (1992), coincidieron en Una mirada en la oscuridad (2006), el largometraje de animación de Richard Linklater y La vida privada de Pippa Lee (2016). Su nuevo trabajo se estrena el 24 de agosto en EEUU.