Murió Rodrigo y nació un nuevo mito popular en la Argentina
Tras una actuación se accidentó en la autopista.Su ex esposa y su hijo sólo sufrieron heridas.Junto con él falleció el hijo de Alberto Olmedo.
En un hecho que causó profunda consternación, Rodrigo Bueno, el popular cantante de música bailantera, murió ayer en la madrugada en un accidente automovilístico ocurrido en la autopista Buenos Aires-La Plata, a la altura de la localidad de Berazategui, en la zona sur del conurbano bonaerense.
En el accidente también falleció Fernando Olmedo, hijo del actor cómico Alberto Olmedo, desaparecido en 1988 en trágicas circunstancias.
La muerte de Rodrigo implica al mismo tiempo, el comienzo de un mito, similar para muchos al de Gilda, cuyo fallecimiento despertó pasiones entre sus seguidores.
En medio de una honda congoja que invadió a familiares y fans, los restos mortales del ídolo cuartetero de 27 años fueron trasladados a la Municipalidad de Lanús para ser velados a partir de las 15.30.
Más de cuatro mil personas confluyeron en la sede comunal en forma casi inmediata, y la cifra se multiplicó con el correr de las horas pese a las lluvias, hasta superar las 20 mil personas.
El gobernador bonaerense Carlos Ruckauf asistió al velorio, mientras que para hoy se espera la llegada de Diego Maradona, quien anunció que vendría al país para despedir los restos de su amigo. (Ver página 42)
El presidente Fernando De la Rúa envió a la madre de Rodrigo una carta escrita por su puño y letra, donde expresa su pesar por el fallecimiento. (Ver página 42)
El velatorio, a cajón abierto, se realizó en Lanús porque en esa localidad Rodrigo iba a ofrecer anoche un show.
«El Potro» Rodrigo manejaba cerca de las 4 de ayer su camioneta 4×4 Explorer roja acompañado de Olmedo, de su ex esposa Patricia Pacheco, su pequeño hijo Ramiro -de 4 años- y los integrantes de la banda Jorge Moreno y Alberto Pereyra.
Como consecuencia del accidente, Moreno recibió heridas de consideración y quedó internado en el Hospital Isidoro Iriarte, de Quilmes; en cambio, la ex mujer y el hijo del malogrado cantante, quienes también resultaron heridos, tras las primeras atenciones recibieron el alta médica.
Todos volvían de la bailanta «Escándalo», en City Bell, cuando a la altura del kilómetro 25,5 de la autopista se produjo la tragedia: la camioneta roja Ford Explorer quedó fuera de control, dio varios tumbos y volcó. Rodrigo, que no llevaba puesto cinturón de seguridad, y Fernando Olmedo salieron despedidos violentamente del vehículo.
Anoche se hablaba insistentemente de la posibilidad de que el accidente hubiera sido provocado por una camioneta blanca que pasó al cantante en la ruta. (Ver aparte)
El artista murió instantáneamente, en tanto que Olmedo falleció una hora después en el Hospital Evita Pueblo de Berazategui, adonde había ingresado agonizante.
Beatriz, la madre del famoso cantante, arribó alrededor de las 9 al aeroparque Jorge Newbery, en un vuelo de LAPA procedente de Córdoba. La mujer, que había salido a las 7.40 de la capital de la provincia mediterránea, declaró ya en Buenos Aires: «Estoy quebrada», aunque sin perder la calma, y manifestó sus sospechas acerca de la posibilidad de que la tragedia haya sido producto de un atentado.
Beatriz se rehusó a ir a la morgue a reconocer el cuerpo de su hijo, y en su lugar ese trámite lo realizó una tía y la novia del joven. La mujer adelantó que «la banda» del cantante «va a seguir tocando siempre, como él quería».
Al grito de «Rodrigo no se va» y arrojándole flores, casi un centenar de admiradoras saludaron el paso del vehículo que condujo, ya pasadas las 11, el cuerpo del cantante cordobés desde la morgue del cementerio de Ezpeleta -donde se le practicó la autopsia-, hacia Lanús.
La autopsia reveló que Rodrigo falleció a raíz de traumatismo cráneo-encefálico, en tanto que Olmedo por traumatismos de tórax y abdomen.
Respecto de Fernando Olmedo, el hijo del primer matrimonio de uno de los máximos actores cómicos argentinos, se supo que ingresó con vida al hospital Evita Pueblo, de Berazategui, pero murió 40 minutos después, cerca de las 5 de ayer.
Según el jefe de guardia Flavio Santinelli, el infortunado joven ingresó al centro asistencial con «politraumatismos, en estado de shock, grave, y con múltiples fracturas». (DyN y Télam)
Su mamá lloró y cantó
BUENOS AIRES (DyN) – Horas después de la muerte del cantante cuartetero Rodrigo, Beatriz Bueno lloró y cantó en público por la desaparición de su hijo.
Mientras los restos de «El Potro» eran velados en la sede la Municipalidad de Lanús, Beatriz entonaba frente a los micrófonos del bailantero programa de tevé «Siempre Sábado» los acordes cuarteteros que llevaron a la fama a su hijo.
Antes, la mujer dijo a los periodistas que no descarta la posibilidad de que su hijo haya sido víctima de un atentado.
«Pienso que fue una camioneta que lo chocó, ahora vamos a ver si fue a propósito o no», expresó Beatriz al referirse al vehículo que habría precipitado la muerte de Rodrigo y de Fernando Olmedo. La joven ex mujer del cantante fallecido y el pequeño hijo de la pareja, que sobrevivieron al accidente, también concurrieron a los estudios de tevé.
Olmedo no iba a viajar, pero lo convencieron de que fuera a ver el recital
A Fernando Olmedo, hijo del recordado cómico Alberto Olmedo, el destino le hizo la peor jugada de su corta vida: contra su voluntad, tuvo que ser convencido por Rodrigo para que lo acompañara antenoche a su show musical en la disco «Escándalo», de City Bell, y así él también encontró la muerte.
Rodrigo cenó el viernes en el restaurante «El Corralón», ubicado en Anchorena, a metros de la avenida Córdoba, de Buenos Aires.
Allí compartió la mesa de Pepe Parada. Y Guillermo, el dueño del lugar, comentó que «estaba bárbaro de ánimo». «Estaba fresquito como si estuviera recién bañado», agregó.
El hijo de Olmedo, también presente pero en otra mesa, se acercó para sumarse a los famosos comensales. En un momento, según comentó Guillermo, Fernando recriminó a Rodrigo que nunca había presenciado un show en vivo del cordobés.
«Te tengo que ver», aseguró Olmedo al cantante. Y éste respondió su cuestionamiento diciendo: «¿Por qué no vas a verme esta noche a La Plata?».
En un principio Fernando dudó de aceptar la invitación, temiendo que el regreso debiera hacerlo a pie, pero Rodrigo, junto a sus allegados, lo convencieron con la promesa de llevarlo y traerlo de vuelta a la Capital Federal. La vedette Beatríz Salomón lloró ayer la muerte de su amigo Fernando Olmedo, el hijo del recordado actor cómico Alberto Olmedo, que murió en el mismo accidente automovilístico en el que falleció Rodrigo.
«Era un tipo amoroso. Yo tenía una especial relación con él porque de todos los hijos de Alberto era el más parecido física y espiritualmente» a su padre, destacó Beatríz sin poder contener el llanto.
Salomón dejó su carrera de modelo a principios de los ochenta para trabajar junto a Alberto Olmedo en televisión y era una de las personas más allegadas al cómico rosarino cuando el 5 de marzo de 1988 cayó fatalmente del balcón del edificio Maral 39 de la ciudad de Mar del Plata.
Sobre Fernando señaló que «tenía la simpleza del padre; era un tipo medio introvertido, muy parecido a su papá», y que «desde que era jovencito andaba por los camarines y era muy divertido». Fernando fue el único hijo varón de Alberto Olmedo que se decicó a la actuación. (DyN e Infosic)
En un hecho que causó profunda consternación, Rodrigo Bueno, el popular cantante de música bailantera, murió ayer en la madrugada en un accidente automovilístico ocurrido en la autopista Buenos Aires-La Plata, a la altura de la localidad de Berazategui, en la zona sur del conurbano bonaerense.
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