Un asesinato político vuelve a conmover al Líbano

DAMASCO/ NUEVA YORK (DPA).- El atentado que costó ayer la vida a uno de los críticos antisirios más importantes del Líbano, Yubran Tueini, fue condenado en duros términos por la comunidad internacional, incluyendo a Siria, país acusado de estar de

trás de una serie de ataques en la vecina nación. Tueini murió ayer al explotar una bomba en el barrio industrial Mukles de Beirut. Junto a él murieron otras tres personas y más de diez resultaron heridas.

El atentado contra el periodista antisirio estuvo dirigido contra la estabilidad del Líbano, dijo un portavoz no identificado del gobierno de Damasco. Según el portavoz, el atentado fue cometido deliberadamente en coincidencia con la presentación del informe de la comisión internacional que investiga el asesinato del ex primer ministro libanés Rafik Hariri, en febrero pasado, «para levantar justamente en este momento acusaciones contra Siria».

La intromisión siria en los asuntos libaneses «debe terminar por completo», dijo desde Washington la secretaria de Estado norteamericana, Condoleezza Rice.

Tueini es el tercer periodista crítico respecto a Siria que es asesinado en un lapso corto.

El jefe de la comisión de investigación de Naciones Unidas, el fiscal alemán Detlev Mehlis, ha expresado la sospecha de que los servicios secretos de Siria están detrás del asesinato de Hariri. En un comunicado emitido en Nueva York, el secretario general de la ONU, Kofi Annan, dijo que este crimen se suma a la campaña contra el derecho a la libertad de expresión de ciudadanos, periodistas y líderes políticos.