Artesanos de Las Grutas tienen espacio renovado

Lámparas, prendas, carteras, muñecos, tejidos y sahumerios son algunos de los productos que se pueden encontrar si se recorre la feria artesanal, ubicada en la primera bajada.

Martín Brunella

LAS GRUTAS (ASA).- Desde siempre su presencia forma parte del paseo nocturno que acompaña el final de las jornadas de playa, porque casi de manera natural cada caminata por el centro confluye en la feria de artesanos de la primera bajada. Allí, año a año, se despliega la belleza y colorido de las más variadas piezas. Alhajas, títeres, muñecos, lámparas, prendas, carteras, tejidos, sahumerios y objetos decorativos surgen ante los ojos de los que recorren los puestos. Todo aquello que uno busque o lo que ni siquiera se imagine que puede construirse con materiales nobles como el barro, la madera, la plata y los más diversos materiales está disponible en la feria “Víctor Menjelou”, de la mano de artesanos locales y de aquellos que desde hace décadas tienen su lugar en la feria, aunque residen en otras ciudades durante el invierno y llegan a trabajar en la temporada estival. “El año pasado me vendiste un duende que me trajo suerte, y ahora vengo a buscarle un compañero”, o “a mi hija le encantó un anillo que le llevé el verano pasado, y como vino conmigo la traje para que se elija algo” son frases de las que abundan cuando uno se interna en los pasillos que conforman los puestos, en los que cada noche confluyen todos los que veranean en Las Grutas. “Como muchos de los turistas retornan cada año con varios de ellos ya nos conocemos, y nos vuelven a comprar de verano en verano. Eso es lo lindo de esta feria, y de ahí el compromiso que pedimos y esperamos de todos nuestros artesanos los que formamos parte de ella” expresó uno de los puesteros. Por otra parte, a los atractivos que siempre tiene para ofrecer esta tradicional feria desde hace dos noches se sumó la oferta de un grupo de cincuenta artesanos que llegaron de San Carlos de Bariloche, en el marco de una actividad organizada por el Ministerio de Desarrollo Social de la provincia a cargo de Jorge Vallaza. Esa cartera costeó el viaje y la estadía de los artistas, que tuvieron la posibilidad de vender sus productos y recuperar de esta manera parte de las pérdidas experimentadas como consecuencia de las cenizas volcánicas que menguaron la cantidad de visitantes recibidos durante el invierno por la ciudad andina. Los artesanos barilochenses establecieron una feria paralela en el predio que posee el área de Deportes provincial sobre la peatonal de la segunda bajada, y allí mostraron sus producciones, que fueron gratamente recibidas por los visitantes, que durante el desarrollo de la actividad acompañaron con su presencia. Aunque inicialmente la llegada de estos artesanos generó reacciones negativas entre los integrantes de la feria local, debido a que no les anunciaron previamente la llegada de sus pares, finalmente la situación quedó resuelta.


Martín Brunella

Registrate gratis

Disfrutá de nuestros contenidos y entretenimiento

Suscribite por $1500 ¿Ya estás suscripto? Ingresá ahora