Así sobrevivieron, así las rescataron
Fue riesgosa la tarea de los voluntarios de la Comisión de Auxilio con nieve hasta la rodilla. Los detalles de la proeza para que las dos extranjeres lleguen a salvo.
PERDIDAS EN LA MONTAÑA
El rescate de las dos turistas estadounidenses desde el Valle Van Titter, Cerro Catedral, resultó por demás exitoso pero no estuvo exento de peligros y demandó una importante logística y un gran esfuerzo de los cuatro rescatistas que subieron a la montaña, cubierta por una gran nevada. “El sendero estaba totalmente tapado y por la nieve muy blanda, incluso con esquís, nos hundíamos hasta la rodilla”, explicaron. Los cuatro se turnaron en abrir huella, cada 15 minutos.
En el operativo participaron la Comisión de Auxilio del Club Andino Bariloche (CAX), Parques Nacionales y la Policía de Río Negro, a través de cuyo 911 se realizaron las comunicaciones más importantes para resolver la situación. Los montañeses reconocieron que las comunicaciones fueron “vitales para el éxito del operativo”.
Los cuatro expertos designados por la CAX para subir a la montaña en pleno temporal, fueron el guía de alta montaña Sergio Camacho Villalobos, acompañado por los andinistas Gabriel Goin, Marcelo “Topo” Deza y Fernando Márquez. quienes subieron con esquí de travesía desde el lago Gutiérrez, por el Valle del Van Titter.
Las chicas habían subido sin nieve y llevaron un equipo de esquí alpino y unas raquetas improvisadas. Los rescatistas explicaron que tenían equipo “mínimo” y bolsas de dormir “de verano”. Al bajar con nieve se extraviaron y la gran cantidad caída las desorientó. Sobrevivieron la primer noche, en una cueva de nieve que supieron cavar.
Gabriel Goin explicó que los socorristas llevaron además de sus teléfonos celulares
equipos VHS, con los cuales se comunicaban entre si y también con el refugio Frey y la central de Parques en Bariloche. Así, una vez localizadas las perdidas y resuelto de que pernoctarían el sábado por la noche en el refugio Piedritas, se solicitó apoyo al refugio Emilio Frey, desde donde bajó con esquí de travesía el encargado, con comida y alementos que permitieron que la noche en el precario albergue sea un poco más confortable.
Fernando Márquez indicó que en el ascenso, al llegar a la parte alta, se dividieron en dos grupos, pues no estaba clara la localización de las extraviadas. Reconoció que el peligro de avalanchas fue constante y que vieron al menos 9 de las que se precipitaron hacia el valle.
El domingo, por la nieve, tardaron 5 horas en bajar hasta el lago (en verano se tarda una) y allí, Angela Walker y Chiara Laurece, de 20 y 21 años, fueron trasladadas hacia Bariloche.
DeBariloche
Comentarios