Pese a los pronósticos, los ríos Neuquén y Limay van en baja

Había una alerta sobre los caudales, que podían orillar sus máximos, pero al fin la situación es manejable, dicen.

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NEUQUÉN (AN).- La Autoridad Interjurisdiccional de Cuencas (AIC) informó que a pesar de la alerta vigente, los caudales de los ríos Neuquén y Limay no llegarían a los niveles máximos previstos ya que sus entrantes están en bajada desde hace varios días. El lunes el Limay llegaría a los 900 metros cúbicos por segundo. Desde Defensa Civil aseguraron que no hubo mayores inconvenientes.

Desde el miércoles rige un alerta de la Autoridad Interjurisdiccional de Cuencas por el probable aumento significativo del caudal del río Neuquén en la zona del Chañar. Se esperaba que los niveles alcancen los 500 metros cúbicos por segundo (el máximo es de 600) por las precipitaciones que se venían desencadenando en los últimos días. Sin embargo, Elías Sapag, representante por Neuquén de la AIC, indicó que es posible que no se llegue a los niveles máximos previstos por un cambio en el sentido de las tormentas. De esta manera el Neuquén alcanzaría los 480 metros cúbicos por segundo. “Sucede que las entrantes están en bajada y se mantendrán así”, explicó.

Lo mismo sucede en el Limay, con las lluvias moderadas que se esperan el fin de semana, descenderán tanto las entrantes de Alicura como de El Chocón. Sapag adelantó que el lunes podría llegar a los 900 metros cúbicos (el máximo es 1.200). “Vamos a tener agua suficiente para abastecer a nuestros clientes, y también al riego para la fruticultura y la horticultura”, indicó. Agregó que en los embalses de Piedra del Águila el agua subió cinco metros, en El Chocón 0,80 metros y en Los Barreales cerca de 2 metros. “Hay agua de reserva para nuestros usuarios”, sostuvo.

Vanina Merlo, directora de Defensa Civil de provincia, afirmó que salvo los problemas en la zona norte (Andacollo y Huinganco) registrados a principio de semana, en la región de la confluencia no hubo mayores inconvenientes. “Las defensas resistieron y no tuvimos que evacuar gente. La AIC realizó las erogaciones necesarias para que no se afecten las zonas pobladas y hubo un trabajo conjunto con meteorología”, remarcó Merlo.

En la ciudad no hubo evacuaciones ni problemas con las defensas. El presidente de la comisión vecinal del barrio Rincón de Emilio -uno de los asentados en la costa del Neuquén-, Edgardo Aranda, explicó que por el aumento del caudal el agua viene un poco más turbia pero sigue siendo potable (el servicio se capta desde el río). También destacó que la defensa costera funciona con normalidad, y que solo se han visto pequeñas lagunas en sectores donde hay obras de la Cooperativa de Agua, pero obedece a la consecuente subida de las napas.


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