tom y jerry

Han sido tan amigos como oponentes. Sus mayores logros datan de mediados del siglo XX, cuando el gato y el ratón corrían uno detrás del otro, amparados en bellas sinfonías clásicas. Millones de personas los disfrutaron antes en el cine que en la pantalla chica. Se llevaron un puñado de Oscar bien merecidos. Después la televisión los volvió enormes y cambiantes.