Balladini renunció y pidió dejar en un mes el STJ

La dimisión podría tratarse el lunes.

Marcelo Ochoa

“Cumplí con mis objetivos. Soy un hombre de acción”, dijo ayer el magistrado.

VIEDMA (AV).- El juez Alberto Balladini renunció a su cargo en el Superior Tribunal de Justicia de Río Negro a partir del 30 de noviembre. Lo anunció públicamente ayer tras presentar su dimisión ante el gobernador, Miguel Saiz, en su calidad de presidente del Consejo de la Magistratura.

Ahora será este cuerpo el que deberá aceptar o no su renuncia. Balladini es el segundo de los tres jueces del máximo cuerpo judicial de la provincia que presenta su dimisión para acogerse a los beneficios jubilatorios. El primero fue Luis Lutz, quien lo hizo en diciembre del 2010 y recién pudo irse en agosto pasado.

Este lunes se reunirá el Consejo de la Magistratura y los comentarios no se hicieron esperar.

El gobernador buscaría introducir en el orden del día el tratamiento de la renuncia, con una gran diferencia en relación a lo sucedido con Lutz y en otro contexto provincial. De aceptarse el alejamiento el escenario adoptaría un tinte más político, teniendo en cuenta la antipatía no disimulada entre Balladini y el gobernador electo, Carlos Soria.

El presidente del STJ recordó ayer ante la prensa que ingresó a la Justicia el 5 de noviembre de 1993 y a los 14 días asumió en el máximo cuerpo. Remarcó que en estos 18 años de gestión ocupó los más altos cargos a lo que puede aspirar un magistrado, como la presidencia de la Junta Federal de Cortes y Superiores Tribunales de Justicia de las provincias argentinas durante cinco años, así como haber sido miembro fundador y presidente en dos períodos de la Red Federal de Capacitación de los Poderes Judiciales del país.

Balladini destacó también la puesta en marcha en estos años de herramientas para mejorar el servicio de justicia con la capacitación como pilar esencial. En este aspecto mencionó los nuevos métodos, como la resolución alternativa de conflictos y el papel fundamental que deben tener los Juzgados de Familia, las oficinas de atención al ciudadano y de violencia contra la mujer. “Cumplí con mis objetivos. Soy un hombre de acción”, dijo al anunciar que tiene proyectos y se ubicará “donde el núcleo social al que pertenezco así lo decida, para servir no sólo a la justicia, sino a quienes integran la sociedad y a los que menos tienen”.

Balladini consideró que “es hora de entregar el testimonio a otros, que sabrán mejor que yo responder al desafío de esta hora” al señalar que “vuelvo a la sociedad civil, en la seguridad de que puedo y debo hacer mucho todavía. La cátedra, el trabajo en las organizaciones sociales serán de aquí en más mi campo de trabajo. Aspiro a volcar allí mi experiencia y el entusiasmo con que siempre he tratado de asumir mi compromiso y mi deber”.

En referencia al recambio gubernamental compartió la esperanza en un futuro mejor, manifestando la seguridad de “poder ser útil desde otras funciones, en la sociedad civil. Dejo hoy mi lugar a otros, deseándoles el mayor de los éxitos”.


Marcelo Ochoa

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