Buscan en Allen a un hombre por el niño de 4 años que sufrió quemaduras

Personal de las Comisarías 6° y 33° trabajaban este miércoles para dar con el paradero de un hombre que habría estado en el lugar cuando un niño se quemó, en una vivienda del barrio Vidriera. Inicialmente se creía que había atacado al menor de edad, pero esa versión todavía no está confirmada para la Fiscalía.

Se cree que el adulto se habría alejado del lugar arrojándose al canal de riego, cuyo cauce pasa a metros de esa esquina, de las calles El Calafate y Tobas.

Según dio a conocer el portal de noticias AN Allen, el menor ya fue trasladado de urgencia al Hospital López Lima de Roca, para ser asistido por la gravedad de las quemaduras. Consternada, una familiar del niño contó a ese medio que el pequeño es oriundo del barrio Norte y se encontraba de visita en el lugar.

El padre del niño, fue entrevistado por LU19, donde confirmó el hecho. «Yo estaba trabajando por acá cerca a unas cuadras, y de repente llegó corriendo mi sobrinita, diciendo que a mi hijo un hombre lo había prendido fuego y después se había tirado al canal. Me dijo como estaba vestido y todo, con remera y pantalón de Boca y una visera roja». De inmediato, el hombre se dirigió al lugar del hecho, comprobó que el nene estaba con quemaduras y lo llevó a la guardia del hospital. De allí fue derivado al centro asistencial de Roca, de mayor complejidad. El hombre señaló que se había comunicado con la mamá del pequeño, quien confirmó que se encuentra en observación pero fuera de peligro.

Según indicó el padre, el pequeño tiene quemaduras en el vientre, debido a que por el calor se le pegó la remera, y en los dos piernas, pero aún no sabía la gravedad de las lesiones. «Por suerte no se lo veía tan mal, no se durmió ni lloró, ni nada», explicó a la radio.

El hombre señaló que desconoce quién pudo ser el agresor, ya que no es de la zona. «Yo vivía en Neuquén y me trasladé hace poco acá, cuando comenzó la pandemia. Estaba en Neuquén haciendo unos trabajos y recién ayer volví para acá para ayudar a mi hermana, en un merendero», explicó. Dijo que en el lugar hay varias personas que tienen adicciones. «Cuando salí a buscar a este tipo, que parece que estaba con un grupo, los consulté y estaban todos ‘empastillados’, no me podían hablar, son un peligro para los chicos del barrio», dijo.

El hombre desmintió versiones de que las quemaduras hayan sido en un juego con su sobrina. Fuentes judiciales señalaron que la única testigo fue la prima de la víctima, también de pocos años, pero el estado de shock en el que quedó por la situación y su corta edad impidieron a los investigadores tener certezas sobre lo ocurrido.

Anoche se esperaba el parte médico del hospital para determinar la gravedad de las lesiones que sufrió el niño, que permanecía internado. También se esperaba que el niño estuviera en condiciones de hablar para poder brindar su versión sobre los hechos. En el sitio trabajaron agentes de Criminalística y de la Brigada de Investigaciones, mientras permanecía cercado el lugar, en plena calle.

La esquina del hecho:




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