Cervecerías y bares, bajo la lupa de la Municipalidad de Bariloche

Los dueños de cervecerías, bares y locales gastronómicos de Bariloche tuvieron que adaptarse a la “nueva normalidad”, urgidos por la necesidad de mantener a flote sus negocios, en este contexto de pandemia, causada por el nuevo coronavirus, sin turistas. 

Por eso, tuvieron que implementar protocolos que la Municipalidad revisó antes de que les permitieran abrir sus puertas a principios de julio pasado.  

El secretario de Fiscalización municipal Javier Fibiger informó que desde julio, cuando se dio la apertura, salieron a fiscalizar “controlando los protocolos presentados por los establecimientos, y los aforos de personas y medidas sanitarias”. 

Comentó que en lo que va de esta apertura “se han aplicado sanciones e incluso se han realizado clausuras, como el caso público de una cervecería que realizaba eventos”. Se trata del caso de una cervecería ubicada en la calle Vicealmirante O´Connor al 600. “Nuestra primera preocupación es la protección y la preservación de la salud de nuestros vecinos: de quienes consumen y de quienes venden”, afirmó Fibiger, en esa ocasión tras la clausura de ese comercio. 

Fibiger aseguró el viernes que desde julio a la fecha se impusieron “alrededor de 7 clausuras y 30 multas aproximadamente«. «Todas tienen que ver con la falta del cumplimiento de protocolos, en especial el cumplimiento de los horarios”, destacó. Dijo que esas sanciones “luego pasan al tribunal de Faltas” municipal.

“En la mayoría, el municipio acompaña antes de sancionar, obviamente, que cuando se incumple y se avisó y fue reiterado la falta, se procede a la sanción”, aseveró. “Pero, en líneas generales, los titulares de los establecimientos entienden la situación y que debe cumplirse los protocolos y horarios para poder seguir funcionando”. 

Fibiger manifestó que son pocos los bares, cervecerías o locales gastronómicos cerrados en la ciudad. “Deben trabajar todos, si no los tienen no pueden trabajar”, enfatizó. 

Cuando se le preguntó su opinión sobre la experiencia de la apertura con los protocolos, el funcionario municipal respondió: “En líneas generales sí ha sido positiva. Hay que seguir trabajando en el cuidado que debe ya tener cada persona, la responsabilidad social de cada persona de cuidarse. Si somos responsables, podemos seguir avanzando en la apertura de la ciudad”.