Chos Malal: Los arreos viajan rumbo a las zonas de invernadas

juan carlos parada

Los arrieros trashumantes del norte neuquino van rumbo a las invernadas: la trashumancia comenzó a fines de marzo y a esta altura ya están pasando los últimos piños por Chos Malal. Les resta aún varios días para llegar a los campos donde pasarán hasta octubre.

Nada es fácil: a las distancias que separan las veranadas de las invernadas, más de 300 kilómetros, los crianceros enfrentan una prolongada sequía. A pesar de las lluvias de las últimas semanas, esperan que las precipitaciones aumenten porque sólo así estarán garantizadas las pasturas y una buena zafra.

Son cientos de crianceros los que realizan la trashumancia en la zona norte de la provincia y no cuentan con otra alternativa porque ninguna de las dos zonas por sí solas pueden garantizar el agua y las pasturas durante todo el año; por eso se habla de regiones complementarias.