Si te gustó “La chica del tren”, te puede gustar….

“La mujer en la ventana”, de A. J. Finn, es una novela de misterio, atrapante, de esas que uno empieza y no puede dejar. Algo parecido a lo que ocurrió con “La chica del tren”. Si se abre la primera página, hay que llegar al final.

Si fuera un filme (cosa en la que ya están trabajando y ya se sabe que Amy Adams será la protagonista) sería un thriller, con aroma a cine negro, clásico y electrizante

En pocas palabras, el libro se centra en Anna Fox, madre de una niña de ocho años, separada, psicóloga infantil, que vive recluida en su casa de Harlem.

Anna es bipolar y su trastorno mental la incapacita para salir. Sólo se relaciona con su ex marido y su hija vía telefónica.

Sola, aburrida, le hace frente a las horas eternas que tiene por delante, chateando con desconocidos, disfrutando de viejas películas mientras toma un poco de vino (quizás más de lo aconsejable)… y espiando a los vecinos (sí, para los amantes de los clásicos, es una cita casi textual de “La ventana indiscreta”, de Alfred Hitchcock)

Lo que ve Anna, del otro lado de su vidrio es a los Russell, una familia aparentemente perfecta. Al menos hasta una noche en la que Anna ve lo que no debe ver. Y entonces, su mundo se cae en pedazos y sus propios secretos salen a la luz.

El propio Stephen King, rey de reyes del misterio y el terror, dijo que esta es una novela “excepcional”. Finn, el autor elogiado, tiene sentido del humor. “Soy A.J. Finn, autor de La mujer en la ventana, una primera novela que Stephen King describe como «excepcional» y yo como «lo máximo que he dado». No hay duda sobre cuál de los dos comentarios es el que va incluido en la cubierta del libro”.

Antes de escribir este primer libro, A.J. escribió para Los Angeles Times, The Washington Post y The Times Literary Supplement. Finn nació en el estado de Nueva York, vivió en Gran Bretaña durante una década y regresó a Nueva York, donde reside actualmente.

“Ahora escribo a tiempo completo. La mujer en la ventana nace de varias experiencias: mi amor por la literatura de suspense, desde los relatos de Sherlock Holmes que devoraba de niña hasta la obra de Patricia Highsmith, que estudié cuando estuve en la Universidad de Oxford; de mi pasión por el cine clásico, sobre todo las películas de Alfred Hitchcock, y de mi lucha personal contra la agorafobia y la depresión. El resultado, espero, es un thriller psicológico en la línea de Gillian Flynn, Tana French y Kate Atkinson, entre otros”, explica él.