Después de un incendio, temen por la seguridad de la Planta de Agua Pesada

Los trabajadores resaltaron que hay químicos peligroso y pidieron que se pongan las instalaciones en condición de conservación hasta que se reactive.

La agonía de la Planta Industrial de Agua Pesada (PIAP) vive un nuevo capítulo porque, después de un incendio, los trabajadores denunciaron que no están garantizadas las condiciones de seguridad lo que podría afectar gravemente a las personas y al medio ambiente por los químicos acumulados.

Desde la junta interna de ATE-PIAP informaron que el siniestro ocurrió el viernes en una de las salas de operadores. Aunque aun se desconocen las causas, los trabajadores destacaron que anteriormente habían informado sobre una filtración de agua de lluvia que caía sobre un artefacto de iluminación.

Los mismos operadores fueron quienes sofocaron las llamas gracias a que se organizaron bien pese a ser pocos. «Cada vez somos menos trabajadores, no hay brigada de emergencia, ya no hay asistentes de seguridad e higiene ni enfermeros; hasta hace 2 meses había 1 enfermero y 1 asistente de seguridad e higiene por turno», detallaron.

Los trabajadores resaltaron que el peligro potencial que representó el incendio fue muy grande porque ocurrió en un área restringida «lo que significa cercanía de productos químicos como hidrógeno y amoniaco en grandes cantidades y concentración».

Por eso reclamaron que la planta sea puesta en estado de seguridad y conservación hasta que se reactive o se le anexe una planta de fertilizantes. Que la PIAP sea vuelta a poner en marcha es el principal reclamo de los trabajadores, que han protagonizado protestas desde que se frenó la producción en 2017.


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