Diseñaron un novedoso cañón para fabricar nieve en Bariloche
SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- Un grupo de técnicos y empresarios locales desarrollaron un cañón para fabricar nieve artificial, que se asemeja a los elaborados en el hemisferio norte, pero a un costo menor. El prototipo se pondrá en marcha durante la próxima temporada invernal y se fabricarían en serie, para los centros de esquí de la Cordillera de los Andes. Guillermo Pericola, quien dirige el grupo, explicó que el aparato es similar a los que venden las empresas europeas pero está adaptado al clima local, mas caluroso y húmedo que los del norte. Dijo que la idea se le ocurrió en la zona del Alto Valle, cuando vio cómo funcionan máquinas similares para el riego en las chacras. “Consulbar Andino”, como se bautizó al equipo, es un cañón de nieve de baja presión, tipo turboventilador de mezcla externa. Esta originalmente configurado para producir en condiciones marginales, esto es, con una temperatura de solo 0 grados. Pericola explicó que “el proceso de funcionamiento es la aspersión y proyección de micro gotas en capacidad de congelarse y precipitar como cristales de hielo/nieve. Se le provee agua –lo mas fría posible- a la presión adecuada y las microgotas producidas en el nucleador, mediante la combinación agua/aire comprimido forman los primeros cristales que impulsados por la corriente de aire generada por el ventilador, chocan y contagian al spray producido por uno o los dos circuitos del aro de aspersión, los cuales se proyectan a una distancia de 30 a 45 metros (según el viento) precipitando al piso como cristales de nieve”. Agregó que “para lograr una producción máxima e ideal la temperatura y humedad relativa deben ser lo más bajas posibles”. El cañón consume de 90 a 460 litros de agua por minuto y puede generar de 6 a 38 metros cúbicos de nieve por hora. El agua se expulsa con una presión que varía de 7 a 40 bar, siendo la ideal de 25. Pericola aseguró que todo el desarrollo y el armado del equipo se realizó en Bariloche, donde se pueden fabricar en serie. Se mostró muy confiado en que estos equipos puedan instalarse en la mayoría de los centros de esquí argentinos y también en parques de nieve. El mismo modelo (más chico) está previsto para montaje fijo sobre una torre de 6 metros.
SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- Un grupo de técnicos y empresarios locales desarrollaron un cañón para fabricar nieve artificial, que se asemeja a los elaborados en el hemisferio norte, pero a un costo menor. El prototipo se pondrá en marcha durante la próxima temporada invernal y se fabricarían en serie, para los centros de esquí de la Cordillera de los Andes. Guillermo Pericola, quien dirige el grupo, explicó que el aparato es similar a los que venden las empresas europeas pero está adaptado al clima local, mas caluroso y húmedo que los del norte. Dijo que la idea se le ocurrió en la zona del Alto Valle, cuando vio cómo funcionan máquinas similares para el riego en las chacras. “Consulbar Andino”, como se bautizó al equipo, es un cañón de nieve de baja presión, tipo turboventilador de mezcla externa. Esta originalmente configurado para producir en condiciones marginales, esto es, con una temperatura de solo 0 grados. Pericola explicó que “el proceso de funcionamiento es la aspersión y proyección de micro gotas en capacidad de congelarse y precipitar como cristales de hielo/nieve. Se le provee agua –lo mas fría posible- a la presión adecuada y las microgotas producidas en el nucleador, mediante la combinación agua/aire comprimido forman los primeros cristales que impulsados por la corriente de aire generada por el ventilador, chocan y contagian al spray producido por uno o los dos circuitos del aro de aspersión, los cuales se proyectan a una distancia de 30 a 45 metros (según el viento) precipitando al piso como cristales de nieve”. Agregó que “para lograr una producción máxima e ideal la temperatura y humedad relativa deben ser lo más bajas posibles”. El cañón consume de 90 a 460 litros de agua por minuto y puede generar de 6 a 38 metros cúbicos de nieve por hora. El agua se expulsa con una presión que varía de 7 a 40 bar, siendo la ideal de 25. Pericola aseguró que todo el desarrollo y el armado del equipo se realizó en Bariloche, donde se pueden fabricar en serie. Se mostró muy confiado en que estos equipos puedan instalarse en la mayoría de los centros de esquí argentinos y también en parques de nieve. El mismo modelo (más chico) está previsto para montaje fijo sobre una torre de 6 metros.
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