El rugby de Chos Malal cumplió su sueño

CHOS MALAL (ACHM).- Los amantes del rugby de Chos Malal tuvieron ayer su día de fiesta. Es que luego de mucho esfuerzo lograron coronar un viejo sueño: inauguraron su propia cancha de césped. El lugar que de ahora en más será en centro de reunión de más de un centenar de jóvenes que practican este deporte y de muchos encuentros con quienes vengan de otros puntos de la provincia y del país.

La concreción de la feliz idea es de Ñandú Rugby Club, entidad que se encuentra situada a la margen izquierda de la ruta provincial 43, más precisamente en el kilómetro 3, a pocos metros de una de las salidas de Chos Malal, con destino al departamento Minas. La cancha fue inaugurada a las 10.30 en medio de momentos muy emotivos.

«El rugby, no es sólo un gran deporte y una actividad, sino una forma de vida, una fábrica de amigos y una pasión», señalaron los jóvenes para quienes el rugby forma parte de su vida. Hay también quienes manifestaron que «es un deporte que encierra demasiadas emociones, ya sea, alegrías, satisfacciones, orgullo y muchas otras que con una palabra no puede describir, pero sí se lo puede hacer con el corazón. Ese estilo es el requisito más importante para lograr sentir, jugar, y entender el espíritu del rugby».

Este deporte comenzó a practicarse en esta ciudad en 1985 de la mano del profesor Javier Palero como una actividad escolar.

No pasó mucho tiempo cuando se logró armar varios grupos que aprovechando el espacio que ofrece el complejo polideportivo se congregaban allí para entrenar.

Con el transcurrir de los años los grupos fueron creciendo y surgió entonces los colores blanco, negro y azul de la camiseta que los identifica, como así también el nombre del equipo al que se conoce como Ñandú y encontraron cobijo en el Club Bancarios. «El sueño de la cancha propia era la ilusión de todos: jugadores, entrenadores, padres y de todos aquellos que formamos la familia del rugby y que tan bien nos ha recibido esta ciudad».

La cancha está cubierta de césped y cuenta con las medidas reglamentarias y todo aquello que hace que el lugar sea el orgullo para todos quienes trabajaron para que el rugby chosmalense tenga su propio lugar.