Estaciones van por la venta a granel

el balance de los expendedores

La reactivación petrolera de la mano del desarrollo shale empujó a otros sectores económicos de la región. Uno de ellos fue la venta de combustibles: Neuquén encabezó los despachos de naftas y sostuvo el consumo de gasoil, cuando en la mayoría del país estos números cayeron. Sin embargo la baja del precio internacional del petróleo amenaza con retrotraer los márgenes conseguidos por las estaciones de servicio. Para Marcelo Pirri, presidente de la Cámara de Expendedores de Combustibles de Neuquén y Río Negro (Cecnrn), las prioridades del sector pasan por el tratamiento del proyecto de ley de comercialización de combustibles. Desde hace alrededor de una década las petroleras que refinan se apropiaron de la venta a granel de combustibles (agro, transporte y cargas), lo que significó una cuota negativa para las estaciones del 35%. –El precio del petróleo se hunde, ¿esto va a modificar los valores del combustible en la Argentina? –Quisiera creer que no, porque hay que ver la incidencia del crudo en el refino. Tengamos en cuenta que existe un costo muy alto en lo que es la extracción, sobre todo por el nivel salarial del sector petrolero. Si llegado el caso que siga bajando, podría aparecer en escena algún tipo de problema como ser que alguna compañía directamente importe combustible porque resulte más barato. –¿Cuál es el balance general para las estaciones de servicio? –Podemos decir que fue positivo, en cuanto a que hubo un acomodamiento de precios en relación con el tema inflacionario y un poco más sobre la media de los aumentos en los costos. Esto trajo aparejado, en valores absolutos, mayores ingresos para las estaciones, pero en el último tramo de los últimos tres o cuatro meses en el país se viene repitiendo una caída importante en las ventas, sobre todo en el gasoil por el tema de la merma en la actividad productiva e industrial. –¿Cómo se mide esto en la región? –Acá es más marcado en Río Negro porque dependemos de la fruticultura esencialmente. No es así el caso de Neuquén, que está viviendo un auge petrolero con el que ha aumentado sus volúmenes de venta y sobre todo en los corredores de las zonas productivas. –¿Se acabaron los problemas de abastecimiento? –Acá en la zona hemos sido afectados esporádicamente por el tema de cortes de rutas o el viento en la zona de Plaza Huincul, que obliga a cortar el despacho; también por algún pequeño problema logístico, pero no por falta de producto. Creo que de a poco, con la reestatización de YPF, el aumento en la producción, el aumento en los precios de los combustibles, se favoreció el escenario para que aparezcan volúmenes que antes no se producían. También hay que tener en cuenta que la caída en la demanda ha hecho que se esté despachando menos producto. –¿Se siguen cerrando estaciones de servicio? –No, acá no. Incluso acá se han abierto una Shell nueva en Neuquén y se reabrió una YPF en Centenario. Desde hace un año o un poco más se terminó eso de que las estaciones cerraban por falta de rentabilidad. Hoy eso es esporádico, quizá en las ciudades grandes cierre alguna porque ha quedado mal ubicada o porque el valor inmobiliario del terreno es mucho mayor al que pueda tener como estación de servicio. –¿De qué se trata el anteproyecto de ley que buscan impulsar? –El proyecto fue ingresado a comisiones y recibido por legisladores de la oposición. Nuestra intención es ingresarlo en febrero o marzo próximo. La idea es sacar un marco regulatorio como tiene la energía eléctrica donde queda bien definido quién es el mayorista, quién es el transportista y quién es el minorista. –¿Cuál es el objetivo? –Lo que más planteamos ahí es el tema de que vuelva a ser la estación de servicio el minorista que tenga la posibilidad también de vender como mayorista en los casos en los que antiguamente los hacíamos. Porque abastecíamos al agro o al transporte en forma a granel, distribuyendo el combustible nosotros mismos. Y eso lo están haciendo directamente las empresas petroleras y es eso lo que queremos recuperar en alguna medida. –¿Quiénes impulsan el proyecto? –Lo impulsamos a través de una multisectorial en la que participamos las cámaras y la federación que integramos, también el sindicato de las estaciones de servicio y las petroleras, pero en este caso sólo participó Shell. –¿Cuánto los afecta no poder vender al tipo mayorista? –Calculamos que hoy las compañías están vendiendo un 35% en forma directa y a esto sumale las estaciones propias que tienen. Si bien hay casos como Shell que han disminuido sus estaciones, no es el caso de YPF que tiene más de 100 propias y eso hace que también compitan con nosotros. Hace que el propio proveedor compita con quien le provee. En definitiva lo que se busca es un marco regulatorio que supere las coyunturas, como las que se asoman. (F.A.)

Con la baja del crudo no se descarta una corrección del precio.

“La idea es sacar un marco regulatorio como tiene la energía eléctrica donde queda claro quién es mayorista, quién distribuye y quién es minorista”.

es el volumen de venta que actualmente venden directamente las petroleras en forma mayorista.

Presidente de la Cámara de Expendedores de Combustibles de Neuquén y Río Negro. Asumió el cargo el pasado 23 de mayo en reemplazo de Adolfo Grittini, actual vicepresidente.